Con miras a las elecciones municipales del 2020, Asunción ya cuenta con ocho aspirantes para la Intendencia. De esta manera, surge una activa puja por el cargo que abandonó el ex intendente Mario Ferreiro, salpicado por supuestos hechos de corrupción que envuelven a su entorno debido al caso de recaudación paralela en el municipio. En la rosca, conocida como “Asado de fin de semana”, estaban dos de sus sobrinos.
Entre los precandidatos se encuentran actores políticos y no políticos como alternativas para la ciudadanía capitalina, varios de ellos no se ahorraron en lanzar cuestionamientos contra la administración del ex jefe comunal, al punto de calificar su gestión como una de las peores en los últimos 30 años de democracia.
El Partido Colorado es el que más opciones presenta hasta el momento, ya que cuenta con seis precandidatos, mientras que la oposición presenta a la ciudadanía dos aspirantes como alternativas.
Por la Asociación Nacional Republicana (ANR) ya hicieron públicas sus pretensiones el empresario Juan Manuel Brunetti; el ex jefe de Gabinete del Poder Ejecutivo y actual concejal, Julio Ullón; el ex diputado Óscar Tuma y el senador Martín Arévalo.
Mientras que existen fuertes rumores de que el ex edil y actual diputado Hugo Ramírez tendría pretensiones de pugnar por el cargo, así como su colega Arnaldo Samaniego, quien buscará su rekutu tras estar al frente de la municipalidad durante el período 2010-2015.
OPOSICIÓN
Por otra parte, en el sector de la oposición se encuentra el senador Jorge Querey, de profesión médico, quien fue electo para el presente período a través de la concertación del Frente Guasu (FG). El parlamentario estará representando a la nucleación tras un consenso entre los movimientos y partidos que conforman el grupo político.
Mientras que el PLRA estará apostando por la figura del empresario Guillermo Cortés, quien es un outsider dentro de la arena política. Actualmente, la oposición se encuentra debatiendo en torno a una alianza con el fin de enfrentar a los colorados tras la imagen dañada que dejó a su paso Ferreiro. En teoría, esta “mancha” dejada por este podría perjudicar las chances de las candidaturas independientes.