La ministra de Justicia, Cecilia Pérez, anun­ció que en el marco de la Ley de Emergencia Peni­tenciaria vigente, todas las cárceles del país ya cuentan con el apoyo de las fuerzas públicas de policías y milita­res. Además, por estas fiestas hay un refuerzo de 500 agen­tes penitenciarios.

“Nosotros tenemos reforza­dos el perímetro de todos los penales de adultos con per­sonal policial y militares, eso va a continuar todo este tiempo”, comentó.

Explicó que esto se viene rea­lizando desde hace tiempo con las fuerzas públicas, luego de haber tenido infor­maciones de inteligencia de una posible fuga o rescate de un posible líder del Primer Comando Capital (PCC).

“De hecho, como ustedes saben, hace poco tuvimos una información de inteli­gencia de un supuesto plan de fuga o de rescate de uno de los líderes del Primer Comando Capital y en base a eso estamos trabajando con la Policía y con las fuerzas militares”, apuntó.

También dijo que las 500 personas que se necesita­ban para refuerzo en estas fechas ya fueron asigna­das a las distintas cárceles y también a los centros edu­cativos.

Mencionó que para un mejor resguardo de seguridad, solo en el penal de Tacumbú requieren de 300 agentes más. Por otra parte, anun­ció que en la penitenciaría de Tacumbú y en las dos cár­celes de Emboscada ya no se permiten el ingreso de reclu­sos, teniendo en cuenta que están sobrecargadas, por lo tanto, los nuevos que ingre­san son enviados a Encarna­ción o Misiones.

La secretaria de seguridad del Estado comentó también que hay un control riguroso a través del sistema informá­tico en las penitenciarias, en el marco de las fiestas para evitar el ingreso de objetos prohibidos.

Las autoridades del Gobierno actual buscan brindar mayor segu­ridad y efectividad operativa a las cárceles de todo el país ante los últimos acontecimientos lamentables registrados en las cár­celes. Uno de los primeros casos más sonados y lamentables fue lo ocurrido en la penitenciaría de San Pedro, donde falle­cieron 10 reclusos, que fueron degollados y quemados vivos en una pelea entre facciones del Primer Comando Capital (PCC) y el Clan Rotela. Ese mismo día también se registró una riña en la penitenciaría de Tacumbú.

Asimismo, se dieron otros casos como en Encarnación, donde resultaron heridos durante el motín dos agentes penitenciarios. El caso se dio con fuga y toma de rehenes