El ministro de Agri­cultura y Ganadería, Rodolfo Friedmann, fue abucheado en el Festival de la Raza realizado en Villa­rrica, cuando el intendente de la ciudad, Gustavo Nava­rro, le agradeció por la pre­sencia y por hacer posible la realización del evento. En ese instante los gritos de los pre­sentes no se hicieron esperar en el estadio Ykua Pytã, con la presencia de unas 5.000 personas. El intendente se vio impedido de continuar con los agradecimientos y obligado tuvo que despedirse deseando a los presentes que disfruten del festival.

El repudio generalizado durante unos minutos tuvo que ser cortado por una de las organizadoras, que soli­citó al público calmarse y respetar la presencia de Friedmann como autoridad. Pero esto enojó aún más a los presentes, que continuaron con silbatinas y gritos.

Así, el ministro de Agricul­tura sigue estando en el ojo de las críticas solo a días de cuando su esposa Marly Figueredo, en un intento por defenderlo por su desempeño en la cartera de Estado, lo dejó en ridículo alegando que tra­baja unas 20 horas semana­les. Este comentario también se volvió viral en la red social Twitter y generó todo tipo de indignaciones de los usuarios. Pese a que luego aclaró que se equivocó y se refería a que su esposo trabaja 20 horas al día en el ministerio.

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La falta de capacidad y for­mación dentro del rubro agropecuario engalanan la designación de Friedmann al frente del ministerio, cau­sando un malestar generali­zado entre los ciudadanos y gremios del sector que cues­tionaron el nombramiento que hizo el presidente Mario Abdo Benítez.

Una administración con denuncias de corrupción y otras irregularidades en la gobernación del departamento del Guairá es la que describe a Friedmann. Esto sería tam­bién uno de los motivos por los que el ministro no fue bien recibido en su comunidad.

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