El ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, se sigue aferrando al cargo de la institución pese a una pésima administración y un notable rechazo por parte de la ciudadanía, sectores políticos y empresariales ante la ola de inseguridad y delincuencia. Villamayor se ganó el repudio solo a meses de asumir el pasado 15 de agosto del 2018 debido a que el mismo responde a los distintos casos de violencia e inseguridad señalando que se tratan “de un hecho aislado”.

En los últimos tiempos en nuestro país se ha notado una gran ola de inseguridad y delincuencia que ha dejado varias víctimas que lamentar, como el caso de un menor de 16 años que salía de su institución educativa en Ñemby y fue interceptado por motochorros, quienes le dispararon para poder robarle. Otro caso registrado hace meses fue el de una menor que se dirigía en horas de la mañana a su colegio y fue atacada por un hombre con intenciones de robarle.

Cabe recordar, y no menos importante, la crisis que se generó en las distintas penitenciarías del país, donde incluso se han registrado muertos, heridos y fugados. En la penitenciaría de San Pedro durante un enfrentamiento de grupos criminales fallecieron 10 reclusos.

Eso sin olvidar el caso de la joven Lidia Meza Burgos, de 18 años, quien falleció luego de recibir 16 puñaladas en la Agrupación Especializada de parte del preso Marcelo “Piloto” Pinheiro, quien luego fue expulsado del país.

El rechazo hacia la gestión de Villamayor se hizo más fuerte ante el último caso que se vivió en Asunción, en el que tras una emboscada en la Costanera Norte un grupo de personas logró liberar al jefe narco del grupo criminal Comando Vermelho Jorge Samudio, alias Samura. Los delincuentes interceptaron a la comitiva policial que trasladaba al recluso a la cárcel de Emboscada. Allí se produjo un enfrentamiento con los uniformados, que derivó en la muerte del comisario Félix Ferrari.

Esto demuestra que en los últimos meses el secretario encargado de la cartera de Interior solo está improvisando a la hora de tomar una decisión. Sin embargo, Villamayor, quien cuenta con el total respaldo del propio jefe de Estado, reafirmó su postura de que no dejará el cargo.

Cambios en el grupo motorizado Lince

Uno de los primeros errores que cometió el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, a pocos meses de asumir la cartera de Estado, fue el de imponer cambios en la estructura del Grupo Lince. Con la reducción de la presencia de los agentes en las calles permitió el aumento de los delitos cometidos por los motochorros.

Este hecho fue bastante cuestionado debido a que desde la presencia de los agentes motorizados se redujeron en cierta forma los asaltos callejeros. Sin embargo, el ministro no tuvo otra opción que rever su postura y admitir que “cambió” de opinión y que los linces continuarían con los patrullajes callejeros.

“Es cierto que tenía una visión más crítica cuando entré y la realidad me hace decir que se deben revisar puntos de vista”, dijo Villamayor.

Coche bomba para rescatar a “Piloto”

En la ciudad de Presidente Franco, departamento de Alto Paraná, autoridades del Gobierno hallaron en una vivienda un coche bomba que pretendía ser utilizado para rescatar de la Agrupación Especializada al presunto cabecilla del Comando Vermelho, Fernando Marcelo Pinheiro, alias Marcelo “Piloto”.

Durante el trabajo fueron abatidos tres supuestos miembros del Comando Vermelho y se encontró una gran cantidad de explosivos. Uno de los individuos tenía en su poder un fusil AK47, en tanto que el otro portaba un AR15 y el último una pistola calibre 9 milímetros. Dos de los abatidos eran brasileños. En el vehículo se halló 84 kilos de dinamita en gel, dispositivo que fue desactivado por personal de la FOPE y posteriormente detonado.

Asesinato de joven en la Especializada

En noviembre del 2018 se registró un asesinato en el interior de la Agrupación Especializada, donde la víctima fue identificada como Lidia Meza Burgos (18), quien fue asesinada por el preso brasileño Marcelo “Piloto” Pinheiro, ahora expulsado del país.

La mujer recibió 16 puñaladas generando múltiples heridas en la zona del cuello, tórax, abdomen y región lumbar, además de contusiones en el cráneo, que se produjeron por golpes de puño o cualquier otro elemento sólido sin filo.

Según declaró Marcelo “Piloto”, asesinó a la mujer a fin de no ser extraditado a su país para cumplir su condena en Brasil, alegando que en Paraguay todo es más fácil porque no existe justicia. El preso pretendía ser juzgado en Paraguay por el crimen, sin embargo, fue extraditado solo a días del hecho.

Masacre en la cárcel de San Pedro

En la Penitenciaría Nacional de San Pedro se registró un violento amotinamiento que dejó al menos 10 muertos y una treintena de heridos durante una riña entre integrantes del Primer Comando Capital (PCC) y miembros del Clan Rotela. Entre los fallecidos fueron encontrados decapitados y quemados vivos. Los heridos fueron trasladados y atendidos tanto en San Pedro como en Asunción.

El motín se inició antes del mediodía y los agentes policiales tuvieron dificultad para parar el enfrentamiento con armas de fuego. En esta cárcel se encontraban recluidos 23 miembros del PCC, quienes encabezaron la revuelta.

Posteriormente, también se dio un enfrentamiento en la cárcel de Tacumbú, donde murió uno de los reclusos. Similar hecho también se dio en la cárcel de Encarnación.

Asalto tipo comando a sede de banco Visión

Con armas de grueso calibre y explosivos, se registró un ataque tipo comando a la sede de Visión Banco en Cruce Liberación, en San Pedro. En el acto, un joven falleció al recibir un impacto de bala por salir a la zona a mirar lo que sucedía. De acuerdo al informe, los delincuentes sitiaron la comisaría local y se valieron de francotiradores ubicados en las adyacencias a la sede bancaria para poder asegurar que los policías no puedan frustrar el delito planeado.

El procedimiento se realizó con un grupo integrado por unas 40 a 50 personas. Los malvivientes estaban munido con armas de grueso calibre además de los explosivos.

Tras dejar completamente destruido el local del citado banco y haber incendiado un automóvil en su huida, los delincuentes esparcieron clavos miguelito para evitar ser perseguidos

Enfrentamiento y liberación de narco

Con el objetivo de liberar al jefe narco Jorge Samudio, alias Samura, un grupo de delincuentes interceptaron en una de las cabeceras de la Costanera de Asunción a la comitiva policial que trasladaba al recluso a la cárcel de Emboscada. Allí se produjo un enfrentamiento con los uniformados, que derivó en la muerte del comisario Félix Ferrari.

En las imágenes de un video se observa el momento en que entre quince y veinte hombres rescataron al jefe narco, a quien trasladaron en otro vehículo retirándose en dirección opuesta a la que llegaron. Las autoridades hicieron incursiones en la zona del Botánico, pero la búsqueda de los delincuentes y del fugado resultó infructuosa. Este hecho generó la destitución del ministro de Justicia y del comandante de la Policía.

Integrantes del PCC escaparon del penal

Semanas atrás, tres miembros del Primer Comando Capital (PCC) se fugaron de la cárcel de Encarnación y tomaron como rehén al jefe de seguridad Miguel Medina.

Luego de arduas negociaciones con la Policía, que se realizaron con ciertas exigencias por parte de los delincuentes, entre ellas la intermediación de un periodista, los miembros del PCC, al ver que estaban acorralados, se entregaron nuevamente y retornaron a la penitenciaría de Itapúa.

Los delincuentes tenían altas exigencias para las negociaciones, incluyendo la presencia de la prensa y ame nazando en todo momento con asesinar al funcionario penitenciario (con quien se quitaron una foto) y de hacer explotar la cárcel de donde se fugaron con explosivos plásticos, pero finalmente se entregaron.

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