A pesar de los innumerables fracasos en la seguridad del país, el ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, se jactó ayer de una buena gestión y de formar parte del Gobierno que más combate ha dado al crimen organizado.
Desde su asunción al mando, Villamayor es blanco de críticas a raíz de su mala gestión y errores que se vuelven innumerables.
En entrevista con la radio Universo 970 AM, el funcionario de Estado indicó que “nunca nadie combatió tanto al crimen organizado como esta administración, por los resultados que se dieron. Tampoco nunca se ha golpeado tanto al crimen organizado, nunca se produjeron tantas detenciones y expulsados del país”.
Añadió también que fue el primer ministro del Interior que se reunió con la Comandancia de la Policía para analizar políticas de seguridad. Cuestionó también las declaraciones del comisario retirado Prudencio Burgos, quien comentó que Villamayor desde que llegó al cargo comenzó a “imponer sus ideas y proyectos” sin escuchar las exposiciones de los agentes.
“Por primera vez en la historia se reunieron con un ministro del Interior para políticas de seguridad. Burgos me ha dicho eso, lo digo con nombre y apellido. Pero que salgan a hablar de injerencia cuando exigían mayor presencia del ministro, me sorprende”, comentó.
Por otra parte, comparó el flagelo de la inseguridad con la humedad que no fue combatida a tiempo y que ahora se esparció. Agregó que la desidia en que está la Policía viene siendo arrastrada hace años. “Tengo comisarías cuyos techos se están cayendo, los policías no tienen chalecos o tienen los chalecos vencidos de hace más de 10 años. El PCC y Comando Vermelho no entraron al país cuando asumió Marito. Antes que ya asuma Marito ya había los secuestros”, comentó.
Entre los casos de inseguridad más notorios bajo la gestión del colorado se encuentran el asesinato de la joven Lidia Meza, cometido en el 2018 por el narcotraficante brasileño Marcelo “Piloto” Pinheiro; el asalto tipo comando en el Banco Visión ubicado en la zona de San Pedro, donde resultó víctima un adolescente; la masacre en la cárcel de San Pedro tras una riña entre los miembros del PCC y el Clan Rotela, donde fallecieron 10 presos, así como el ataque, asesinato a un efectivo policial y posterior fuga de criminales en la Costanera Norte de Asunción para rescatar al narco “Samura”.