El dilema que afecta a los compatriotas migrantes en territorio argentino es nuevamente foco de controversia. En esta ocasión, las críticas sobre la gestión recaen sobre la diplomática de carrera, la consulesa paraguaya en Buenos Aires, Celia Esther Cañete Ledesma, nombrada por el presidente Mario Abdo el 7 de marzo del corriente.
Según lo manifestado por la oficial consular Ana María Alén Vázquez, quien se dirigió al líder del movimiento Honor Colorado así como al presidente Mario Abdo, para poner a conocimiento público los sucesos que dificultan la actividad consular e impiden la aplicación de la ley de arancel consular que establece el instituto de “fuero de pobreza” directamente en detrimento de los migrantes más pobres.
En el comunicado, Alén Vázquez manifiesta que la mencionada cónsul “se dedica a la tarea de perseguir, hostigar y amedrentar a funcionarios contratados y oficiales nombrados por el Poder Ejecutivo. Lo más grave del caso es que discrimina a nuestros connacionales cobrándoles el arancel consular sin tener en cuenta la situación de insolvencia económica, negándoles así el fuero de pobreza”.
