Juan Arrom, Anuncio Martí y Víctor Col­mán, principales sos­pechosos del secuestro de María Edith Bordón viuda de Debernardi, por quienes pesa una orden de captura inter­nacional, habrían escapado a Uruguay tras cancelárseles definitivamente el estatus de refugiados en Brasil, donde se encontraban viviendo los últimos años.

Este rumor cobró fuerza luego de que saliera a la luz una fotografía en la que se observa a Arrom en compañía de sus hermanas y una menor compartiendo una comida familiar. Según las versio­nes que surgieron en torno al caso, las mujeres habrían visitado a su hermano ya en su nuevo lugar de residencia, en Uruguay. No hay que olvi­dar que Brasil limita con Uru­guay muy al sur de nuestro continente.

El estatus de refugiados polí­ticos, tanto de Arrom, Martí como de Colmán, fue can­celado por el Ministerio de Justicia de Brasil días pasa­dos. Por este motivo, los tres deberán volver al Paraguay para responder ante la Jus­ticia paraguaya por el cri­men del que se los acusa. Las autoridades brasileñas habían anunciado que ini­ciarán los procesos para concretar la extradición. El ministro del Interior, Juan Ernesto Villamayor, aseguró que el Gobierno confía plena­mente en las instituciones del país vecino.

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La Comisión Nacional de Refugiados (Conare) del Bra­sil revocó el estatus de refu­giados de Juan Arrom, Anun­cio Martí y Víctor Colmán, y posteriormente fue ratifi­cado por el ministro Sergio Moro. Ya solo se aguardaba que se dicte la orden de cap­tura de los tres en territorio brasileño para su extradi­ción al Paraguay. Al parecer, y como se sospechaba, los prófugos habrían huido al Uruguay. De hecho, las auto­ridades paraguayas ya habían advertido que existía temor de fuga.

CRONOLOGÍA DEL SECUESTRO

El secuestro de la señora María Edith Bordón ocurrió el 16 de noviembre del 2001, en horas de la mañana. La mujer fue interceptada en el Parque Ñu Guasu, donde se encontraba haciendo su acos­tumbrada caminata, por tres hombres armados, quienes formaban parte del grupo que la mantuvo en cautive­rio durante 64 días.

Su liberación se dio al año siguiente, el 19 de enero del 2002, tras varios contactos telefónicos entre los secues­tradores y el ingeniero Anto­nio Debernardi (†), esposo de la víctima, y el pago de una importante suma de dinero.

En aquel entonces, Arrom y Martí eran dirigentes del movimiento político Par­tido Patria Libre. Según las declaraciones brindadas por la víctima ante el Ministerio Público, Arrom sería el jefe de la banda de secuestradores y Anuncio Martí fue identifi­cado como el “guardia malo”, quien estuvo como custodio en la vivienda donde tenían a Bordón en contra de su volun­tad. Días antes del inicio del juicio oral, los acusados esca­paron a Brasil, donde obtuvie­ron refugio.

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