El paro anunciado por los trabajadores del volante, miembros de la Asociación de Profesionales Taxistas de Asunción (APTA), encabezado por Arístides Morales, lejos de ser pací­fico como lo habían prome­tido, dejó como saldo heridos y malestar en los ciudadanos.

El principal precursor de la medida de fuerza, Mora­les, agitó a los taxistas seña­lando que supuestamente la comuna capitalina cederá sus paradas a las plataformas digitales. Tras este discurso, los trabajadores del volante actuaron con violencia, arro­jando piedras y dirigiendo improperios contra ediles y trabajadores de prensa. El cie­rre del paso sobre la avenida Mariscal López, a la altura de la calle Rogelio Benítez, frente mismo al municipio capita­lino, generó la reacción de los efectivos del orden, quienes comenzaron a reprimirlos para despejar la arteria.

Tras cerrar la avenida Mariscal López, los manifestantes fueron reprimidos por la Policía.FOTO:ANÍBAL GAUTO

Mientras Morales exhortaba a los miembros del gremio a resistir, el concejal José Alva­renga lo invitó a una reunión dentro del predio municipal junto con otros representan­tes del rubro. Al asistir, los mismos fueron aprehendi­dos por efectivos de la Policía Nacional y la Fiscalía, encabe­zada por la agente fiscal Carla Rojas, quien dispuso la deten­ción del presidente de APTA y otros líderes: Miguel Toffo­leti, Néstor Díaz Flecha, Cris­tian García, Danilo Pereira, Ángel del Rosario Galeano, Gerardo García y Francisco Raimundo.

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JUEZA ORDENÓ DESPEJAR CALLES

La jueza en lo Civil y Comer­cial Tania Irún hizo lugar a la medida cautelar de urgen­cia solicitada por la Junta Municipal y ordenó a la APTA y demás gremios u organizaciones vinculadas a la medida de fuerza abs­tenerse de impedir el libre tránsito vehicular y pea­tonal de las personas en la capital y específicamente en inmediaciones de la comuna asuncena.

La disposición se comu­nicó vía oficio al Ministe­rio del Interior, a través de la Comandancia de la Poli­cía Nacional, y a la Fiscalía General del Estado a fin de garantizar el cumplimiento de la medida. Posterior a ello, se procedió a despejar la vía.

IMPUTACIÓN

El Ministerio Público imputó a Arístides Mora­les y otros siete dirigen­tes taxistas por los hechos punibles de perturbación de la paz pública y resis­tencia. El fiscal Carlos Ruiz Díaz dijo que se tra­tan de delitos con muy baja expectativa de pena, por lo que corresponde el arresto domiciliario. Hoy a la tarde deberán prestar declaración ante la Fisca­lía Barrial Nº 1.

Los trabajadores del volante anuncian que volverán a movilizarse hoy, a partir de las 8:00, y que permanecerán en vigilia frente a la comuna capitalina.

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