• POR CÉSAR LARRÉ
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La presidenta del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi), Ana María Allen, adquirió en diciembre del 2018, vía licitación pública nacional, vehículos para uso institucional, entre estos dos ambulancias que terminó entregando al Ministerio de Salud en mayo pasado, tras anunciarlo un mes antes durante un acto presidido por el mandatario Mario Abdo Benítez en la explanada litoral del Palacio de Gobierno.

Las dos ambulancias con equipamiento estándar –como rezan los documentos de compra– o de soporte básico –como los paramédicos las llaman– costaron al Indi G. 480 millones cada una, lo que hace un total G. 960 millones, pero se encuentran estacionadas en la base central del SEME (Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias), dependiente del Ministerio de Salud, sin uso alguno y acumulando polvo.

Ana Maria Allen, titular del Indi y David Cardozo, del SEME.

Una de las ambulancias debía destinarse al Hospital del Indígena San Roque González de Santa Cruz, ubicado en la ciudad de Limpio, y otra al Hospital Regional de Concepción, según confirmó el director del SEME, David Cardozo.

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Ni un solo paciente fue trasladado en las costosas ambulancias del Indi desde la compra en diciembre pasado.

Un equipo periodístico de La Nación logró captar en fotografías el estado de abandono en que se encuentran estos vehículos en la base del SEME, ubicada sobre la Avda. Fernando de la Mora de la capital.

SE PASAN LA PELOTA

Al parecer nadie quiere asumir su cuota de responsabilidad en este llamativo caso; es así que las instituciones involucradas dieron versiones distintas de la situación y se inculparon entre sí.

El director del SEME, lugar donde se encuentran depositadas estas ambulancias, justificó que no estén operativas aduciendo que no se tiene un convenio al respecto entre el Indi y el Ministerio de Salud. “(...) Mientras no se tenga eso (el convenio), no podemos sacar los vehículos a que cumplan una función”, expresó.

No obstante, señaló que el acuerdo está próximo a firmarse. “Estamos haciendo un seguimiento constante de esa situación porque también a nosotros nos apremia tener un vehículo que no esté todavía al uso de la ciudadanía; para nosotros es prioridad que esos vehículos estén trabajando”, dijo.

Llamativamente, el responsable del SEME se negó a mostrar el interior de los vehículos, que según trascendió no cuentan siquiera con los equipamientos necesarios.

Sin usarse, visagra de la puerta comienza a oxidarse.

Por su parte, la presidenta del Indi dijo desconocer por qué las ambulancias que entregó hace meses al Ministerio de Salud se encuentran paradas. Es más, apuntó al viceministro de Salud, Julio Rolón, de quien dijo haber recibido reportes del uso que supuestamente se le estaba dando a estas unidades móviles.

Tras la consulta telefónica de este diario, Allen manifestó más tarde que se estaba trasladando hasta la base del SEME para corroborar el estado de los rodados.

“El doctor Cardozo (director del SEME) no está, pero le dijo por teléfono al Dr. José Otaño que esta semana va a firmar el ministro no sé qué. Es algo interno de ellos; el Indi ya hizo su parte y si falta algún dato nunca nos pidieron”, dijo la titular de Indi tras su visita ayer al SEME.

OTROS VEHÍCULOS

Además de las ambulancias, el Indi adquirió una camioneta cerrada tipo minibús para 12 pasajeros por la suma de G. 250.000.000 y dos camiones con carrocería de madera por G. 480.000.000 cada uno.

Mediante otra adjudicación, el Indi compró dos camionetas más, ambas doble cabina tipo pick up 4x4 de la marca Nissan de procedencia mexicana, por G. 256 millones cada uno y una camioneta cerrada tipo 4x4 de la marca Nissan de procedencia japonesa por G. 288 millones.

En total invirtió G. 2.970 millones en compra de vehículos.

Lamenta no haber recibido ambulancia

Roberto Riveros.

Una de las ambulancias adquiridas por el Instituto Paraguayo del Indígena (Indi) debía destinarse al Hospital del Indígena San Roque González de Santa Cruz, ubicado en la ciudad de Limpio. El director de este nosocomio, Roberto Riveros, lamentó que el vehículo por el que se pagó cerca de G. 500 millones no haya llegado a destino.

“Realmente esa ambulancia para nosotros hubiese sido una ayuda magnífica”, dijo. El hospital atiende a diario entre 80 a 100 pacientes, en su mayoría indígenas. Cuenta con una sola ambulancia para traslados de urgencia.

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