Con 36 votos, la Cámara de Senadores designó a la doctora Carolina Llanes como ministra de la Corte Suprema de Justicia. Unas horas después, el Poder Ejecutivo informaba que el presidente, Mario Abdo Benítez, había firmado el decreto por el cual confirmaba a Llanes para ocupar el cargo vacante que dejó José Raúl Torres Kirmser tras jubilarse.
Durante la elección en el Senado, la bancada de Honor Colorado abandonó la sesión al momento del tratamiento de este tema, manifestando el rechazo a la terna por estar viciada de irregularidades. Tras un largo debate, se procedió a la votación nominal con 38 legisladores en sala. La senadora Lilian Samaniego mocionó ante el pleno la postulación de la doctora Llanes por sus 30 años en el ámbito fiscal y judicial. “Tiene la idoneidad y los méritos; además, la Corte necesita de más mujeres”, acotó. La moción fue secundada por los colorados oficialistas Enrique Bacchetta y Rodolfo Friedmann, la luguista Esperanza Martínez y el liberal Salyn Buzarquis, quienes destacaron a esta postulante obteniendo los votos de la mayoría.
Mientras que el senador Juan Carlos Galaverna, de Colorado Añetete, mocionó por el doctor Linneo Ynsfrán, destacando que era el mejor candidato de la terna, pero por una cuestión circunstancial esta vez el pleno optaba por una candidata que no reunía el criterio de mejor postulante, rompiendo así la costumbre instalada en elecciones anteriores, en las que votaban finalmente por el mejor ternado. Finalmente, fue el único que votó por el doctor Ynsfrán.
En tanto que el senador Amado Florentín, de la bancada liberal efrainista, optó por abstenerse debido a que no compartía la opinión de acompañar a la candidata del Ejecutivo. En su alocución, aseguró que por poco y le convencieron de votar a favor de Llanes, hasta que escuchó el “sincericidio” de la senadora Samaniego, en el que quedó en evidencia que la nueva ministra era la elegida por el mandatario.
En tanto que la bancada de Honor Colorado decidió no avalar el tratamiento ni la elección de la doctora Llanes, por lo que por unanimidad de la bancada solicitaron autorización a la presidencia del Senado para abandonar la sala y que se deje constancia en el acta la postura de desaprobación de esta elección.