-Una pena que el intendente de Asunción no haya podido capitalizar toda la confianza que la ciudadanía le otorgó. Sucumbió en el laberinto burocrático y clientelar y a estas alturas ya está como en piloto automático.

-El jefe comunal ya se volvió inmune a las críticas y la ciudad anda a la deriva y a su suerte. ¡Una pena!

-Gran culpa de esta desidia la tienen los asesoretes que eligió Mario, entre ellos un tal “pelado” Benítez, un vendedor de humos nivel dios, quien le hizo cometer muchos errores al intendente y ahora se la da de gran analista político. ¡Andaaa!

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-Una típica frase es “que si la comunicación interna no respira, la externa se asfixia”. Le será difícil al Gobierno encontrar el norte para mantener la confianza de la gente, cuando el mismo ministro de Comunicaciones está envuelto en una serie de problemas de comunicación.

- El proyecto Agenda Digital hace aguas por todas partes no porque carezca de importancia, sino por la falta transparencia en cómo van a utilizar los 130 millones de dólares prestados del BID.

- Hasta ahora, Alecito Peralta Vierci no puede refutar con claridad todas las dudas acerca del proyecto y encima saltaron serias denuncias de cómo su vice está rifando el dinero para beneficiar a docentes de su universidad privada.

-Si ni siquiera la comunicación del Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicación pueden manejar, difícilmente hagan para el resto.

-Varios ministros y directores de entes salieron a buscar “asesorías” por su cuenta para comunicar mejor lo que están haciendo porque si van a depender nomás de “sobrinazo”, van al muere.

-Por eso es que un periodista peso pesado ya renunció a su tradicional programa para “asesorar” a algunos ministros.

-Tampoco sirvió mucho esa ponchada de plata que una binacional entregó a un publicista. Aunque algunos dicen que eso en realidad fue el pago por el laburo en la campaña electoral. ¿Será?

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