Se le viene la noche al ministro JJ. En principio dijo que no tenía conocimiento de la “granja” que funcionaba a un costado de la penitenciaría de San Pedro, pero...

Había sido el destituido director del penal, vía nota, le solicitó presupuesto para ese espacio en mayo pasado y encima le pidió ideas para ponerle nombre al lugar. ¿En qué quedamos?

Pero, al parecer, el ministro encargado de las políticas penitenciarias tendría un muy buen padrino dentro del Gobierno y su permanencia en el cargo podría prolon­garse. ¡Amigos son los amigos!

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Carlita, la ministra “jogui” en el gobierno anterior, fue rajada luego de revelarse que Pavão ocupaba “la suite presidencial” de Tacumbú Hilton.

Cuentan las malas lenguas que su media naranja se encargaba de las negociacione$ con el extraditado recluso.

Pese a este antecedente, Carlita fue premiada con un nuevo cargo en el gobierno actual. Siguiendo esta lógica, lo más probable es que JJ ascienda a un cargo más importante en cualquier momento.

Mirá lo que nos venimos a enterar del gran ñembo paladín de la justicia. “Palín” Buzarquis tiene a toda su parentela mamando de las tetas del Estado, según una investigación de nuestro diario.

Lo que más indigna es que este muchacho se quiere presentar como el gran moralizador del Paraguay y tiene más pecados que el mismísimo Lucifer.

“O se van ellos o me voy yo”, había declarado el “churro campaña” en alusión a los llanistas. Supuestamente sus correlíes se benefician con pactos con el oficialismo con el fin de ubicar a sus leales y hacer negocios. ¡Mira na quien habla!

Hasta ahora le recuerdan a Buzarquis esa rara ecuación de sacrificar cinco años en el Senado por 9 meses en el MOPC. La respuesta está a la vista. Basta con mirar cómo y dónde vive este prócer del liberalismo.

Si los oficialistas azules hablan de purga interna, habría que formularles la siguiente pregunta: ¿Y por casa cómo andamos?

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