- POR ROSSANA ESCOBAR M.
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Los números no cierran para que el presidente de Diputados Miguel Cuevas justifique la fortuna que amasó estando en la función pública. Los G. 1.250 millones que percibió en concepto de salarios durante sus cinco años como gobernador de Paraguarí no rinden ni para cubrir las millonarias inversiones que realizó en su fastuosa residencia inaugurada en el 2014, primer período de su jefatura departamental. Entendidos dicen que la casa del parlamentario está valuada entre G. 1.000 millones a G. 1.200 millones.
Para más, al momento de asumir como gobernador, Cuevas estaba acogotado con deudas, era un moroso, tenía cuenta corriente cancelada y hasta fue inhabilitado para firmar cheques por tres años junto a su esposa Nancy Florentín en enero del 2013, según mediatizó una entidad bancaria.
Según la publicación realizada por el Banco Familiar, la inhabilitación corresponde a la causal del artículo 13 de la Ley de Cheques: “la persona que libre un cheque bancario, propio o en representación de una persona física o jurídica, contra una cuenta corriente cancelada o en talonario de cheque bancario ajeno o adulterado, será inhabilitada por tres años para operar en cuentas corrientes bancarias”. La sanción se extendía hasta el 2016.
Registros comerciales y publicaciones periodísticas del 2014, primer año de mandato de Cuevas como gobernador de Paraguarí, dejaban al descubierto demandas por mora en su contra, dos de ellas ascendía a G. 658 millones, según trascendió. Sin embargo, su deuda más conocida es la contraída con Juan Domingo Delgado, quien compró 26 pagarés de G. 25 millones cada uno, firmados por el político y que totalizan G. 625 millones.
Delgado le entabló una demanda a Cuevas, luego de que este último se desentendiera de pagar su deuda, según nos confirmó el demandante. Cinco años después, la denuncia sigue cajoneada en los escritorios de los jueces de Paraguarí, sostuvo Delgado.
Otros dos nombres de demandantes contra Cuevas por mora que saltaron en el 2014 son Francisco Brítez Giménez y Blanca Sosa de Rolón, esta última en ese momento era directora de una escuela de Yaguarón.
TRANSFERENCIA
Sus deudas y las primeras sospechas sobre el origen de su prosperidad en su ciudad Sapucai, lo llevaron en el 2014 a realizar la jugada de transferir parte de sus bienes a nombre de sus hijos. Enzo Cuevas Florentín se volvió heredero de las tierras que el papá declaró como compradas durante sus años de funcionario portuario. Mientras que Raúl Adilson Cuevas Florentín surgió como próspero ganadero con lote de 200 cabezas de vacuno.
Hasta la majestuosa residencia familiar, inaugurada después de ser gobernador, transfirió a nombre de su hijo Enzo. Seis propiedades traspasó Cuevas a nombre de su retoño para blindar sus bienes ante la ola de demandas por mora.
Cabe remarcar que ninguna de estas deudas consignó Cuevas en su Declaración Jurada de Bienes presentada ante la Contraloría de la República. Al contrario, el ex gobernador de Paraguarí declaró una cuenta a cobrar por G. 4.460 millones al ex gremialista de la producción, Silvio Riveros.
Riveros ya declaró ante la Fiscalía que nunca prestó un solo guaraní de Cuevas y que no le debe absolutamente nada. El testimonio del ex gremialista evidencia una declaración jurada falsa por parte del parlamentario.
En el 2016 Cuevas comenzó de vuelta a registrar propiedades a su nombre. En ese año declaró compra de granjas por G. 954 millones, suscribió G. 1.920 millones como actividad agropecuaria.
Considerando solo el valor de la casa que inauguró, las estancias que registró en el 2016 y la cotización de vehículos, las inversiones de Cuevas fueron el doble de todo lo que percibió como gobernador. Esto sin contar los gastos en el alto nivel de vida que lleva la familia, el costo de mantener al menos 8 peones que cuidan los establecimientos, empleadas domésticas, hijos sin trabajar y una esposa con modesto salario que actualmente es de G. 2,5 millones en el MEC, etc.
De G. 9.727 millones de patrimonio que declaró Cuevas en el 2014, hizo desaparecer la deuda de los G. 4.460 millones con Riveros y redujo el valor de sus bienes en el 2018 a G. 3.509 millones.
Alistan movilización para pedir celeridad en investigación fiscal
Escrachadores, comisiones vecinales perjudicadas durante su mandato como gobernador y pobladores del departamento de Paraguarí estarán presentes.
Ciudadanos autoconvocados de Asunción y del departamento de Paraguarí se movilizarán hoy al medio día en el microcentro capitalino hasta inmediaciones de la sede de la unidad especializada de Delitos Informáticos, ubicada sobre la calle Humaitá, para pedir celeridad a la fiscala Irma Llano, en la investigación que pesa sobre el presidente de la Cámara Baja, Miguel Cuevas.
De acuerdo con el denunciante y uno de los impulsores de la movilización, el concejal de Ybycuí Ezequiel Cáceres existen todas las pruebas concretas para que Cuevas sea imputado, sin embargo, afirma que la fiscala de la causa está perdiendo credibilidad y su trabajo apunta al blanqueo.
“Ya presentamos todas las pruebas, las fiscala ya tiene en su poder todo para que le pueda imputar, no es fácil movilizar a las personas que fueron estafadas para que puedan declarar y los documentos pertinentes, sin embargo, la fiscala no le imputa y ya va perdiendo credibilidad”, manifestó el concejal, quien denunció a Cuevas, por supuesto enriquecimiento ilícito y declaración jurada falsa.
Sostuvo también que representantes de las comisiones vecinales que fueron perjurados durante la administración de Cuevas en la gobernación participarán de la marcha.
Por su parte, María Esther Roa, de la comisión escrache, dijo que “la prueba de fuego está en las manos de la Fiscalía y de concretarse el contubernio político-fiscal que tanto detestamos, la sociedad civil sabrá qué hacer para frenar este despropósito que nos condena a la miseria”, indicó.