El contralor general de la República, Enrique García, tuvo una suspicaz reunión con un grupo de senadores del Partido Liberal Radi­cal Auténtico (PLRA) en un claro intento de rever­tir su probable destitución en el juicio político que está en marcha.

El furtivo encuentro se rea­lizó en el departamento de la legisladora Zulma Gómez, en un piso del edificio Curu­payty II, ubicado en las calles 25 de Mayo y Curu­payty, centro de Asunción.

Allí, el contralor mantuvo una reunión con seis legis­ladores azules. El contacto para la sigilosa reunión fue el senador Dionisio Ama­rilla, del PLRA, quien lo acompañó hasta el lugar. Analy Valiente, esposa del diputado liberal Dionisio Amarilla, ejerce el cargo de directora de Declaraciones Juradas de la Contraloría, precisamente la institución encabezada por García.

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Según los datos, corrobo­rados por periodistas en el lugar, García ingresó y salió del sitio de manera furtiva para no ser abor­dado por la prensa. Un lujoso vehículo abando­naba raudamente cerca de las 19:00 el edificio, en el que se supone pudo haber salido el funcionario.

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