El jefe de Estado, Mario Abdo Benítez, decidió acudir al economista estadounidense Jeffrey Sachs con el objetivo de asesorar al Gobierno en materia de polí­tica energética, específica­mente con miras a la rene­gociación del Anexo C del Tratado de Itaipú con el Bra­sil, que se iniciará en agosto del 2023. Sachs es un presti­gioso docente vinculado a la Universidad de Columbia de Nueva York, una de las más prestigiosas del mundo.

La presentación del doctor por parte del Ejecutivo surge tras conocerse el pasado mar­tes 26, en un encuentro con Jair Bolsonaro, la intención del vecino país de pagar tari­fas a bajo costo a la hidroe­léctrica por la energía que le cede Paraguay. Este plan­teamiento surgió de boca del nuevo director brasileño de Itaipú, Joaquim Silva e Luna.

Al respecto, Alejandro Adler, integrante del equipo ase­sor de Sachs, quien estuvo ayer en el Palacio de López, expresó que se buscará lograr un acuerdo justo para el país y su gente. Mientras que el vocero de la Presidencia de la República, Hugo Cáceres, mencionó que el trabajo del también científico será ad honorem.

“Queremos que la renegocia­ción sea justa ante todo para Paraguay. Se hará un análisis profundo del sector energé­tico, incluyendo el acuerdo existente; esto debe ser justo para ambas partes. Es ape­nas la primera comunicación entre Abdo y Sachs, quien acompañará al equipo lide­rado por el presidente de la República”, mencionó Adler.

Señaló también que el punto de partida del economista se cen­trará en poder actualizarse con respecto a las informaciones de la renegociación del Tratado de Itaipú. “Queremos actualizar todo lo que sabemos desde el 2013 respecto al sector ener­gético de Itaipú. El beneficio personal no es un interés para Sachs y su equipo. Acá en ver­dad se debe facilitar un proceso que sea de lo mejor para Para­guay”, comentó el investigador científico del Centro de Solu­ciones para el Desarrollo Sos­tenible de la ONU.

Adler indicó que en un estu­dio, que Sachs había realizado hace más de cinco años, reveló que Paraguay canceló su deuda por los créditos toma­dos para la construcción de la represa en el 2008, por lo que no debía seguir pagando a Brasil. Inclusive, sostuvo que podría reclamar la devo­lución de US$ 5.300 millones. Incluso, según ese análisis, nuestro país dejó de percibir US$ 780 millones solamente en el 2012 por su excedente energético entregado al Bra­sil, considerando su valor real, ya descontados todos los costos y los pagos recibi­dos en ese concepto.

Por último, indicó que no solo en el equipo negociador deben participar los técnicos, sino también políticos, incluso del sector opositor. Adler se refi­rió también a la reforma edu­cativa e indicó que Paraguay podrá tener dentro de 15 años una mejor educación y afirmó que existe voluntad para cam­biar la realidad del sector.