La Fiscalía General del Estado acusó a Raúl Fernández Lippmann por enriquecimiento y lavado de dinero, por lo que pidió que la causa se eleve a juicio oral y público. Fernández Lippmann, ex secretario del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), es uno de los principales acusados en el caso de los audios filtrados.
La fiscala Victoria Acuña lo acusó por enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y lavado de dinero, y pidió que la causa se eleve a juicio oral y público.
Recordemos que Fernández Lippmann fue secretario del ex senador colorado Óscar González Daher, actualmente privado de su libertad en la Agrupación Especializada de la Policía Nacional. El caso de los audios filtrados hizo que ambos sean investigados por la Fiscalía, en donde se reveló un presunto esquema de tráfico de influencias en la mencionada institución.
La agente fiscal Acuña informó que el acusado Fernández Lippmann tenía ingresos legales por solo G. 20 millones, pero contaba con bienes que alcanzaban los G. 1.400 millones.
El ex secretario del JEM estaba recluido en la Penitenciaría de Tacumbú. Por el caso de los audios filtrados, además de González Daher, también estaban involucrados el ex senador Jorge Oviedo Matto y el ex ministro del Interior, el abogado Carmelo Caballero. También, Cristian Manuel León Guimaraes, ex funcionario del JEM, fue acusado por la misma causa.
En los audios filtrados que desnudaron el tráfico de influencias en el JEM, Fernández Lippmann alardea de haber manoteado a González Daher una “torta”, como llamaban a bolsas llenas de dinero. En dicho audio se relata la complicidad entre Fernández y González Daher.
Al darse publicidad a la acusación de la fiscala Acuña, el abogado de Fernández Lippmann, Álvaro Arias, comentó: “Me parece una decisión populista de parte de la fiscala porque realmente no tiene el patrimonio que dice que tiene la fiscala. Se le acusa por enriquecimiento ilícito sin tener evidencias que puedan sostener eso”, afirmó abogado.
Al abogado Álvaro le llama la atención la acusación del monto del supuesto enriquecimiento e indicó que no tiene idea cómo concluyó que ese patrimonio le corresponde a su cliente, ya que, según dice, no hay pericias ni informes de correspondencia de la Contraloría.