Con notoria intención de pase de factura, el senador liberal Enrique Salyn Buzarquis presentó ayer una denuncia contra el ex ministro de Obras Públicas Ramón Jiménez Gaona por los trabajos no concluidos del metrobús, que según el legislador causaron grandes perjuicios a la ciudadanía.
Buzarquis, quien es conocido con el mote de “palada inicial” debido a que solo a eso llegaba su gestión al frente de la cartera de Estado, fue imputado por lesión de confianza por su gestión al frente del MOPC. La denuncia fue realizada por su sucesor Ramón Jiménez Gaona, ex ministro en la administración de Horacio Cartes, por el incumplimiento de pago de una deuda de US$ 600.000 a una empresa italiana.
Buzarquis, quien funge de rey de las chicanas, realizó ayer la denuncia contra el ex alto funcionario del MOPC por lesión de confianza y habla de “un clavo para el Estado” de US$ 50 millones. Ante este hecho, el legislador sostuvo que esto no puede quedarse sin que los responsables paguen por lo ocurrido, señalando que se trató de una estafa planificada. Agregó que es llamativo que Jiménez Gaona no se manifestó al respecto desde el inicio de la problemática.
“Una estafa planificada y programada. ¿Por qué estafa? Porque supuestamente venían con el cuento de que las empresas que venían de afuera harían las obras más baratas. Mentira. Con la ampliación del metrobús y las modificaciones del costo final iba a ser mucho más”, afirmó el legislador tras presentar su denuncia en la Fiscalía General del Estado.
El senador liberal, quien ya es conocido por ser campeón de las chicanas, cuestiona al ex ministro de Obras por la inversión de casi 50 millones de dólares. “Cincuenta millones de dólares prácticamente se invirtieron. Yo le pregunto a Jiménez Gaona, ¿dónde está la plata? ¿Qué hicieron con la plata? Motta Engil ya cobró US$ 23 millones, después ya pidió 18 (millones) y van a pedir más. El Estado se queda con un clavo y, encima de eso, el perjuicio que hubo para la gente de Asunción, Fernando de la Mora y San Lorenzo”, cuestionó.