El ministro de la Secretaría Nacional de Inteligencia (SNI), Esteban Aquino, manifestó que el mayor problema en la Triple Frontera es la evasión impositiva, generada por importaciones de productos provenientes por lo general de China y Estados Unidos.
Señaló que la táctica utilizada por los importadores es la falsificación de facturas, disminuyendo el monto real entre el 30% y el 40% para abonar menos impuestos. Como alternativa, el secretario de Estado propone que se establezca un sistema en conjunto con los demás países para obtener informaciones precisas de la importación. Esa propuesta la planteó al subsecretario del Tesoro de los Estados Unidos, Marshall Billingslea.
Explicó también que la situación se genera al darse un comercio entre tres países con diferentes políticas tributarias y cambiarias, lo que hace que las importaciones sean facturadas a un precio equis y el importador al falsificar aquí su factura para presentar a las autoridades aduaneras de Paraguay lo reduce considerablemente.
“¿Esto para qué se hace?, por supuesto, para pagar menos impuestos sobre las mercaderías. Como las facturas están a un menor precio, el importador al tener que pagar esa factura al proveedor a través del sistema financiero paraguayo, solo puede transferir el monto de esa factura subfacturada”, dijo Aquino durante una entrevista a la 970 AM.
Agregó que el mecanismo de solución ante estos casos es “un poco de voluntad política” de los países involucrados de manera que compartan con el Estado paraguayo la factura real de la transacción realizada en el país de origen.
“Lo que nosotros necesitamos es un poco de voluntad política de los Estados Unidos y lo único que necesitamos es que ellos puedan compartir con nuestra aduana las facturas de las mercaderías de nuestras importaciones o de sus importaciones para nosotros desde allí. Esta gente de esa manera ya no podrá falsificar esa factura y tendría que trabajar dentro de la legalidad y nosotros aumentaríamos nuestras recaudaciones, que serían altamente beneficiosas para el país, es decir, una formalización de la economía a partir de compartir un poco nuestros datos”, manifestó.
Agregó que por lo general el remanente de las facturas subfacturadas lo tiene que realizar por otros medios de pago y a veces fuera de Paraguay. Normalmente, según afirma, es realizado a través del sistema financiero brasileño.
“Con esto se demuestra que en realidad más que lavado de dinero, lo que existe es un esquema de evasión impositiva a través de la falsificación de facturas. En realidad no se lava, en realidad se ensucia el dinero”, destacó.
Aquino asegura que existen evidencias de grandes importaciones que fueron adquiridas a un precio equis, sin embargo al llegar al país fueron facturadas a casi el 50% menos del precio real. Todo este conflicto de evasión incluso crea otras teorías. “Ese remanente es el que crea toda esta teoría, este marco conflictivo. Queremos un poquitito de voluntad política por parte del gobierno de Estados Unidos para que sencillamente compartan con nosotros esas facturas de compras en tiempo real, online de ser posible y con ese ya vamos a estar sabiendo cuánto realmente se está evadiendo y vamos a obligar a la gente a que pague lo que tiene que pagar en Aduanas, con eso vamos a aumentar las recaudaciones y poder hacer frente a nuestros compromisos”, finalizó.