La Línea 46, explotada por la empresa Automotores Villa Hayes SRL, propiedad del ex gobernador de Presidente Hayes, Octavio Manuel Gómez, es denunciada ante el Viceministerio de Transporte y el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) por incumplimiento de su parque autorizado y las frecuencias establecidas en el pliego de bases y condiciones de la línea. Además habría otras irregularidades.
Los denunciantes son miembros de la comisión Fomento y Desarrollo III, ubicada en el barrio Canese Cué de la ciudad de Villa Hayes, quienes aseguran que la empresa de Gómez no cumple con el contrato de explotación de servicio que tiene firmado con la entidad a su cargo, motivo por el cual solicitan la apertura de un sumario administrativo y la cancelación de su permiso.
Requieren también que se realice un nuevo llamado a licitación para otorgar la línea a otra firma que cuente con la capacidad suficiente y necesaria para cumplir con los requerimientos básicos para la prestación de un buen servicio a sus usuarios.
Entre los cuestionamientos más graves mencionan que la Línea 46 tiene solamente siete unidades de transporte para cubrir todo el itinerario para el cual se comprometieron. Lo resaltante del caso es que al momento de la adjudicación fueron autorizados veinticuatro ómnibus para la circulación, pero lejos está de cumplirse.
NOTA DIRIGIDA AL MOPC
“Esto provoca el total incumplimiento de las frecuencias establecidas, más aún en horario pico, dejándonos a todos los habitantes de Villa Hayes en plena ruta Transchaco a nuestra suerte, sin poder transportarnos hasta nuestros lugares de trabajo o nuestros hogares.
Estando probados estos incumplimientos, le solicitamos se abra sumario administrativo a esta empresa y se proceda a la cancelación de su permiso y licite públicamente esta Línea 46 para que una nueva empresa de transporte pueda prestarnos un servicio más humano y digno”, dicta parte de la nota remitida tanto al viceministro de Transporte, Pedro Britos, como al ministro del MOPC, Arnoldo Wiens.
No es la primera vez que los pobladores se pronuncian por este problema. La situación data de hace años y los lugareños utilizan distintas vías, como las redes sociales, para hacer llegar sus inquietudes. A pesar de las múltiples quejas, hasta la fecha la situación continúa sin ser resuelta.