La fiscala general del Estado (FGE), Sandra Quiñónez, manifestó ayer que el Ministerio Público indagará sobre la incautación realizada en Argentina de 300 armas de guerra y municiones con capacidad de perforar chalecosantibalas, cuyo destino sería la agrupación criminal Comando Vermelho.
Anunció que hoy conversará al respecto con agentes de la unidad de Asuntos Internacionales. “No te puedo dar una respuesta en este momento, pero también hablaré con los fiscales encargados de investigar el crimenorganizado. No puedo emitir ningún tipo de opinión hasta hablar con ellos”, mencionó ayer.
La decisión de Quiñónez surge debido a que Paraguay habría servido como hoja de ruta para la entrega de estos armamentos, que fueron adquiridos en la ciudad de Miami, Estados Unidos. Los mismos fueron remitidos como “ropas deportivas”.
La incautación se realizó el jueves 1 de noviembre por la Gendarmería y Aduana del vecino país, segúninformaron portales digitales de Argentina. El operativo se realizó en un inmueble localizado en Partido de Campana, provincia de Buenos Aires.
Durante el operativo se logró capturar a cuatro sospechosos acusados de integrar el grupo criminal brasileño. Parte de la publicación señala que el procedimiento de investigación comenzó hace tres semanas, según la fuente de la AFIP.
“Las autoridades argentinas recibieron una alerta de la Homeland Security, departamento de Seguridad Nacional de los EEUU”, refiere La Nación digital de Argentina.
El listado de armas secuestradas incluye ametralladoras Halcón, fusiles FAL, M16 y AK 47. Además de pistolas Colt, Browning y Beretta. Dentro del paquete también figuraban accesorios como silenciadores, así como las miras telescópicas, insumos de recarga, proyectiles calibre 7.62, bengalas, entre otros objetos.