Tanto el Gobierno como la dirigencia del movimiento Colorado Añetete, movimiento encabezado por el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, omiten reacción alguna ante las denuncias de supuestos hechos de corrupción que salpican a los ex gobernadores y actuales legisladores Miguel Cuevas y Rodolfo Friedmann, ambos de la línea abdista.

Al respecto, el vicepresidente de la República, Hugo Velázquez, expresó ayer que desde su sector político no tomarán medidas contra los parlamentarios sin tener resultados judiciales.

Sobre las denuncias contra el senador Friedmann, afirmó que solo se trata de conflictos “cuasipersonales” por la confrontación entre el ex jefe de Estado Horacio Cartes con el dirigente guaireño por una banca en la Cámara Alta.

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

“Sabemos bien que ahí hay un problema. No hay ninguna prueba, sino las denuncias. Las pruebas vamos a dejarlas en el momento de la investigación judicial”, mencionó, pese a la existencia de documentos que avalan las posibles irregularidades cometidas por el senador y su entorno cuando encabezaba la gobernación del cuarto departamento.

Velázquez agregó que el caso de Cuevas, titular de la Cámara de Diputados y ex gobernador de Paraguarí, es parecido al de Friedmann. Actualmente los supuestos hechos de corrupción cometidos por ambos dirigentes no fueron puestos en debate dentro del movimiento.

“Cómo tomaremos decisiones por publicaciones cuando hay investigaciones

en las cuales no se ha llegado a ningún puerto. ¿Cómo nosotros vamos a tomar así decisiones como gobierno? Sabemos que hay investigación y en virtud a eso tomaremos las decisiones”, indicó. Tanto Cuevas como Friedmann en reiteradas ocasiones esgrimieron en su defensa que son perseguidos políticos.

Dejanos tu comentario