Un confuso incidente se produjo ayer de madrugada entre efectivos de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) en la estancia Agüerito, ubicada a 87 kilómetros de la ruta nacional número 5 Gral. Bernardino Caballero, en Concepción. El episodio producido alrededor de las 3:00 dejó un muerto y dos heridos.

En principio, las versiones indicaban un supuesto ata­que de las bandas armadas de la zona, principalmente la sospecha iba dirigida al autodenominado Ejército de Mcal. López, encabezado por Alejandro Ramos. Sin embargo, horas después, el Departamento de Comuni­cación Social de la FTC daba la versión de lo ocurrido, relatando que a la hora seña­lada, el sargento 1º Francisco Rojas Barrios realizó varios disparos hacia la vivienda donde se encontraban des­cansando sus camaradas.

En este acto resultaron heridos tres efectivos: los vicesar­gentos Pablo Damián Díaz, Josué Barrios Morel y Flores Ramírez. Este último falle­ció mientras era trasladado para la asistencia médica en el Hospital Regional de Con­cepción.

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“El agente que realizó los disparos manifestó que pensó que se trataba de delincuentes, por eso pren­dió fuego contra ellos”, afirmó luego el ministro de Defensa, Bernardino Soto Estigarribia, tras hablar con el comandante de la FTC, Gral. Héctor Grau.

Ya a la tarde, la fiscala Liz Noemí Argüello confirmó que Rojas Barrios dio posi­tivo a la prueba de alcotest con un resultado de 0,559 mg.l. de alcohol en la sangre. “Lo que nosotros levanta­mos como evidencia fue una botella de Tres Leones, Eti­queta Negra, que contenía todavía un poco de líquido”, precisó.

La agente suscribió que el soldado afirmó que durante la madrugada confundió a sus camaradas y “presu­miendo que eran miembros del EPP, se vio obligado a dis­parar contra estas personas y las mismas respondieron el disparo”, sentenció.

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