El abogado Guillermo Duarte Cacavelos, representante legal de la fundación alemana Kolping Paraguay, perdió fi nalmente el juicio que entabló en contra de la empresaria Brigitte Fuzellier por supuesta lesión de confi anza. El cuestionado abogado fue denunciado por uso indebido de infl uencias en el Poder Judicial para evitar que directivos sigan ventilando graves hechos de corrupción en la fundación.

La querella contra la ex directora de la fundación fue impulsada por Olaf Brandenstein, actual director del organismo que recibe fondos de Alemania, bajo el patrocinio legal de Duarte Cacavelos, quien en noviembre de 2017 debió renunciar inclusive a su candidatura al Senado por el Partido Demócrata Progresista (PDP) presionado por nuestras publicaciones sobre sospechas de abusos cometidos en su relación con jueces y fiscales.

A finales de junio último, la empresaria Fuzellier, conocida por la industrialización de la esponja de uso familiar, fi nalmente fue declarada inocente de todos los cargos, luego de un largo proceso judicial. Fuzellier afi rmó el año pasado que el abogado en cuestión y su equipo jurídico hacían tráfico de infl uencias para manipular a jueces y fiscales para conseguir su imputación y posterior acusación, todo con el propósito de evitar que siga investigando las fuertes sospechas de lavado de dinero y denunciado ante el Ministerio Público y el Gobierno Alemán, mientras estaba como directora de Kolping.

FUZELLIER NO PROVOCÓ DAÑO ALGUNO

Max Narváez, representante legal de la mujer, dio detalles del juicio oral que inició en marzo de este año y en el que se logró la libertad absoluta de la empresaria alemana con radicación en Paraguay hace 31 años.

“El juicio oral se llevó a cabo desde el mes de marzo y terminó el 29 de junio pasado. En esa ocasión el tribunal absolvió a Brigitte Fuzellier de culpa y pena luego de un minucioso estudio de lo que había planteado la querella, y por supuesto, de lo que planteó la defensa. Ellos encontraron que no existió daño patrimonial alguno que se pudiera culpar a la señora con respecto a la administración de los bienes de la fundación Kolping”, apuntó Narváez.

“Básicamente, la culparon de haber causado daños patrimoniales en el manejo de cuatro proyectos: el de sensibilización de las personas con discapacidad, el proyecto Enter Máquinas, el de Ecomadera y el de Tarumá. El delito por el cual la imputaron y acusaron fue lesión de confianza, por un perjuicio según ellos de más G. 60 millones”, señaló.

Agregó “durante el proceso pudimos demostrar detalladamente que en realidad jamás existió ningún daño; al contrario, la gestión de la señora Fuzellier fue absolutamente exitosa y produjo una ganancia de más de G.100 millones para Kolping durante los años 2009 y 2010, en que ella estuvo en la dirección. Atento a todas las pruebas del juicio y a un análisis muy criterioso hecho por el Tribunal, se encontró que no había ningún tipo de perjuicio como quisieron hacer creer, por lo tanto, no se confi guraba el delito de lesión de confi anza y no quedó otra alternativa legal y justa que absolverla de culpa y pena y así lo hicieron”, afirmó.

LEVANTARON MEDIDAS RESTRICTIVAS

Destacó que actualmente la señora Brigitte ya no cuenta con ninguna causa y que fueron levantadas todas las medidas restrictivas que le habían dictado, como por ejemplo: la prohibición de salir del país, la fi anza real y la fi anza personal del abogado defensor equivalente a G. 100 millones. Dijo también que hasta el momento los representantes de Kolping Alemania no se pronunciaron al respecto, sin embargo, no descartan posibles cargos por los daños ocasionados a la demandada.

“Hasta el momento la fundación Kolping de Alemania no se pronunció al respecto, pero deberán hacerlo porque perdieron con costas, lo que quiere decir que tarde o temprano pagarán una buena cantidad de dinero. Ellos deberán correr con todos los gastos de los cinco años de proceso y todos los gastos de este juicio oral; de momento empezaremos reclamando las costas”, finalizó.

El juicio oral se llevó a cabo ante el Tribunal de Sentencia de la ciudad de Luque y estuvo integrado por los jueces: Lilian Flores Negri (presidente), Alicia Orrego Pérez y Hugo Segovia Villasanti (miembros titulares) y el secretario judicial Darwin Roberto Oviedo Araujo.