La negativa al juramento de Horacio Cartes como senador activo no solo se debe a intereses políticos, sino también a empresariales, indicó el ex ministro de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) Luis Lezcano Claude. Sostuvo que el debate no se da solo en el ámbito jurídico y constitucional e indicó que la cuestión no está limitada en estos dos aspectos, sino que también hay detrás intereses empresariales en relación a Aldo Zuccolillo, propietario del medio ABC Color, shoppings, inmobiliarias, bancos y otras firmas.
Señaló que más allá del debate jurídico o político, hay un enfrentamiento abierto con grupos de poder económicos. “Yo creo que es un enfrentamiento de grandes grupos económicos, de corporaciones económicas, enfrentados por intereses que van mucho más allá, no tienen en cuenta lo jurídico-constitucional. A ese enfrentamiento se le da un ropaje de una discusión de carácter constitucional, pero lo verdaderamente importante está en el enfrentamiento de poderes de grupos económicos”, sostuvo Lezcano Claude, en conversación con la radio 970 AM.
Indicó que este mismo enfrentamiento ya se presentó en el debate de la reelección presidencial, también, cuando el presidente Horacio Cartes impuso a su candidato para la presidencia del Partido Colorado, y actualmente buscan que sea senador vitalicio. “Esta será la tercera derrota que va tener Cartes, y la tercera victoria de (Aldo) Zuccolillo”, precisó.
El ex ministro de la Corte Suprema indicó que la discusión tiene otros elementos de carácter político, que considera importantes, ya que permitirían esclarecer qué tipo de debate se está teniendo. A su parecer, en estos momentos es más importante el análisis político que el constitucional. “Creo que es más importante el análisis político que el jurídico constitucional”, expresó.
Por otra parte, señaló que el cargo de senador vitalicio no es una imposición. A su criterio, la discusión estuvo sobre esta cuestión y si hay posibilidad de que los ex presidentes de la República puedan renunciar a esta condición. “No es una imposición constitucional, sino simplemente un cargo que pueden o no ocupar, pero también se sigue teniendo muy en cuenta las personas que están involucradas. Creo que ahí viene gran parte de la crispación que se puede observar en la opinión pública”, expresó.