La planta electrointensiva Archer SA, perteneciente a la multinacional del Grupo Sicbras, erigida entre las localidades de Nueva Colombia, Altos y Loma Grande, aprobada en tiempo récord durante el gobierno del liberal Federico Franco, soporta una serie de denuncias por parte de los pobladores de los tres municipios por el olor fétido que expulsa en la región y porque ya estaría afectando inclusive algunos cultivos.
En un principio fue muy valorada por los pobladores de la zona al momento de la puesta en marcha, principalmente por el impacto económico multiplicador que podría generar una compañía de esta índole que arrancó a funcionar el año pasado. Sin embargo, las comunidades de los tres municipios exigen actualmente una solución al grave problema de olor a cloaca que despide la planta fabril.
Todo iba bien con la empresa de gran porte que produce carburo de silicio, cuya instalación demandó una inversión de más de US$ 15 millones y la generación de fuentes de trabajo, ya que los habitantes encontraron una oportunidad laboral sin necesidad de llegar hasta Luque o Asunción, que son las ciudades donde trabaja la mayor parte de las personas que viven en estos lugares.
Más tarde, en diciembre del 2017, para ser más preciso, la realidad iba a ser otra. La tan valorada y anhelada empresa intensificaba su proceso de producción para realizar las exportaciones de sus productos y a la par nacía un olor bastante desagradable, lo cual no era común en esa parte del país, donde siempre se disfrutó del aroma del campo. Así, el olor a "cloaca", como lo describen los pobladores de Inglés Cué, compañía de Nueva Colombia, fue ganando protagonismo principalmente por las noches, según aseguran.
Un equipo de La Nación viajó hasta esa zona para corroborar las numerosas denuncias de pobladores hechas llegar a la redacción.
"En un principio no entendíamos qué pasaba, pensábamos que el olor era de las casas, pero al hablar entre los vecinos todos teníamos el mismo problema, hasta que una noche, cuando ya no se podía dormir, pudimos detectar que el olor provenía de la empresa Archer", indicó Gustavo Taboada, poblador y productor de Inglés Cué, compañía donde habitan unas 5.000 personas aproximadamente.
Según la última encuesta de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos, Altos cuenta con una población de 14.000 habitantes y Loma Grande y Nueva Colombia con 7.000 cada una. Es decir, en los alrededores de Archer SA residen un total aproximado de casi 27.000 personas.
Taboada resaltó que desde ese momento el olor no paró y desató el malestar de numerosos pobladores quienes piden terminar con esta situación. "De día el olor se puede aguantar, pero de noche es insoportable, hay veces que no se puede dormir", acusó el poblador.
NUMEROSAS MOVILIZACIONES
Agregó además que ya realizaron numerosas movilizaciones con las que se consiguió una suspensión temporal de la fábrica en enero de este año, mediante una resolución firmada por la Junta Municipal de Loma Grande y del intendente Carlos Luis Vera Cárdenas (ANR).
No obstante, después de la Semana Santa, la empresa volvió a producir y trajo consigo el raro olor que se instaló hasta la actualidad.
Según explicó el doctor Gustavo Micheletto, quien trabaja en la zona, la puesta en marcha genera también daños a la salud. "El problema de toxicidad no está en el producto carburo de silicio. El perjuicio en la salud y el medio ambiente radica en la combustión fósil (coque de petróleo que elaboran del carburo de silicio)", resaltó el profesional.
De hecho, y debido a las numerosas denuncias ciudadanas de los tres distritos, un inspector de la Seam acudió en enero de este año para una fiscalización rutinaria, detectando el motivo de los fuertes olores. José Ozuna, fiscalizador ambiental, reportó en su informe: "La firma se dedica a la producción de carburo de silicio por medio de hornos, consistente en conductores eléctricos que se encuentran al aire libre. El proceso de cocción es realizado en todo momento a la intemperie sin contar con ningún tipo de captación de gases, y dicho gas en el momento de la verificación emitía un olor fétido".
La firma fue notificada por la Seam sobre esta situación y le advirtió que, si no estaba en regla, las denuncias serían remitidas a la Fiscalía del Medio Ambiente.
GOBIERNO DE FEDERICO FRANCO AUTORIZÓ SU INSTALACIÓN
Si bien la inauguración oficial de la empresa de electrointensiva en Cordillera se realizó en este periodo gubernativo (octubre de 2017), fue entre los gobiernos de Fernando Lugo y Federico Franco (2010 e inicios del 2013) que se aceleraron los trámites, las documentaciones y todas las autorizaciones pertinentes para que opere. Pobladores comentaron a La Nación que en el estudio que se presentó durante la presidencia de Franco ya se tenía conocimiento del olor que despediría la fábrica, pero que los vecinos no fueron informados de esta situación.
El 8 de octubre de 2012, en pleno gobierno de Federico Franco, el entonces gobernador liberal de Cordillera, el abogado Pedro Milciades Duré, otorgó a la empresa el "Certificado de no objeción departamental" para continuar con la instalación de la "planta de producción de carburo de silicio" en el lugar denominado Boquerón, del distrito de Altos (ver facsímil). El 14 de enero de 2013, la Seam dio a conocer su Declaración Nº 010/2013, por la que aprobó el Estudio de Impacto Ambiental del proyecto Sicbras asentado en el distrito de Altos.
Heriberto Osnaghi se desempeñó como titular de la Seam en el gobierno de Federico Franco desde el 27 de junio de 2012 hasta agosto de 2013. Había asumido en reemplazo de Óscar Rivas, quien estuvo al frente por más de tres años en el gobierno de Fernando Lugo. Antes de ser ministro, Osnaghi se desempeñó como director del Medio Ambiente de la Gobernación de Central, cuando Federico Franco era gobernador de este departamento.
La intendenta actual de Nueva Colombia es Lida Rosa Escobar, del PLRA; el intendente de Altos es Juan Félix Ramírez, del PLRA, y el de Loma Grande es Carlos Luis Vera Cárdenas, de la ANR.
LA EMPRESA
Archer SA es una sociedad constituida en el país entre la firma Sicbras Paraguay SA, subsidiaria de la empresa matriz Sicbras Carbeto de Silicio do Brasil Ltda., de capital 100% brasileño, que opera en el sector minero y siderúrgico en el Brasil, América del Sur y Europa desde hace más de 16 años y el grupo multinacional francés Saint-Gobain (Saint-Gobain Group).
El Grupo ofrece una gama de soluciones para edificios que sean cómodos y más eficientes energéticamente. Sus materiales de alto rendimiento también se encuentran en los mercados industriales y de consumo, tales como las industrias automotriz, aeronáutica, sanitaria y energética. A nivel local, Archer manufactura productos para la construcción, vidrios, materiales cerámicos, abrasivos y distribuye materiales de construcción.
Archer SA opera en el país bajo el régimen de industrias electrointensivas, por el alto consumo de energía eléctrica que demandan. Este tipo de empresa no está conectado al sistema de distribución de energía de las ciudades y la conexión es directa de las líneas de muy alta tensión (220 kV). De hecho, opera bajo un régimen especial en cuanto a la tarifa de energía eléctrica.
¿QUÉ ES UNA PLANTA PRODUCTORA DE SILICIO?
Una planta productora de silicio es la encargada de la fabricación del carburo de silicio, que es la combinación entre el carbono y el silicio. El mismo es un material semiconductor que puede ser utilizado en distintos tipos de aplicaciones.
Algunas de las propiedades que los caracterizan son: su dureza, su baja expansión térmica, posee alta conductividad térmica al igual que la resistencia al choque térmico. Tiene bajo coeficiente de fricción y dilatación además de alta resistencia mecánica y a la corrosión. Es un material muy empleado para los usos de cerámicas estructurales.
El silicio es utilizado en cerámicas, vidriados, esmaltados. Es empleado además en la agricultura como fertilizante. Lo utilizan como elemento de aleación en fundiciones y en la fabricación de vidrios para ventanas y aislantes.
Seam afirma que la empresa cumple con todas las normativas ambientales
El director de Gabinete de la Secretaría del Ambiente (Seam), Nelson Caballero, aclaró primeramente que este organismo de supervisión de la ejecución de las acciones ambientales no tiene la potestad de habilitar los emprendimientos, sino la función de la Secretaría es emitir un parecer sobre la viabilidad ambiental de cada uno de los proyectos.
Resaltó que habilitar estos proyectos ya depende de las autoridades territoriales, con referencia a las intendencias de Nueva Colombia, Altos y Loma Grande.
Subrayó que si bien es cierto que la declaración de Impacto Ambiental debe ser un requisito previo, ineludible para tener ese permiso, no constituye el mismo, habilitación alguna. En lo que respecta particularmente a la empresa Archer SA, informó que esta empresa cumplió con todos los requisitos de la normativa ambiental.
En otro momento, explicó que la contaminación de olores no está reglamentada, lo cual es la principal problemática que tienen las personas que viven en lugares aledaños a la multinacional.
"El olor en sí no va a terminar, pero con el tiempo va a ir disminuyendo, esta exposición del olor forma parte del sistema de trabajo de este tipo de empresa; es decir, que los olores están contemplados dentro del estudio de impacto ambiental que se presentó cuando arrancaron las negociaciones y habilitada por el gobierno del Federico Franco", aclaró.