"Creo que para mentir, robar y hacer algo inde­bido también se necesita arte, un mínimo de inteligencia, pero en este caso es tan obvio lo que hacen, porque tratan de embarrar la cancha a par­tir de supuestas irregularida­des que en realidad son absur­das e imposibles que ocurran", dijo Óscar Germán Latorre, ex fiscal general del Estado, quien habló con la radio 970 AM. Aña­dió que no puede ser que las elecciones realizadas correcta­mente sin mayores incidentes ahora se conviertan en ejemplo de un supuesto fraude.

Sostuvo que los denunciantes alegan que las actas electora­les fueron adulteradas, pero al respecto remarcó que ningún partido político tiene copias de esas actas. Añadió que una vez que concluye el escrutinio, se elaboran estos documentos, se colocan en sobres y son remiti­dos a la Justicia Electoral.

Seguidamente, Latorre explicó el procedimiento aplicado en el momento del juzgamiento de actas, que se realiza en presen­cia de los apoderados de los dife­rentes partidos. "Se chequean los certificados de resultado que tienen los apoderados, y si no hay objeciones o impugna­ciones se dispone la carga en un sistema informático, luego se imprimen y se otorga una cons­tancia escrita, una copia escrita de ese acta a aquellas personas apoderadas que deseen contar con esa copia", refirió.

Asimismo, cuestionó que la Alianza en ningún momento refirió dónde estaban o qué hacían sus veedores y miem­bros de mesa durante la elabo­ración de los documentos que dicen ahora que son fraudu­lentos.

"Lo único que pueden decir es que las copias de los certi­ficados de resultados que tie­nen presentan irregularidades y adulteraciones", afirmó. Sin embargo, aseveró que las imágenes en redes sociales son adulteraciones que los propios opositores están haciendo. "No prueban ningún fraude electo­ral", acotó.

Latorre explicó que estar en la mesa electoral no es fácil, pero que en algunos casos los inte­grantes de la misma no tienen los debidos conocimientos y solamente se sientan a mirar lo que hacen los demás. "Los inte­grantes de una mesa son per­sonas, algunas universitarias, otras que apenas terminaron el colegio, algunas que conocen o tienen experiencia en temas laborales y otros que se sientan en la mesa y comienzan a mirar qué es lo que hacen los demás. O sea no es una tarea fácil, que además había en algunos casos decenas de listas de candida­tos y por cada candidatura, por cada lista, había que suscribir seis certificados de resultados", puntualizó.

Finalmente, el letrado dijo que algunos errores "son absoluta­mente normales y frecuentes" aunque aclaró que "no se deben a una intención fraudulenta de nadie".

"Acá el juzgamiento de las actas, que es el único proceso que conocerá quiénes son los gana­dores de las elecciones, se rea­liza acorde a lo que la ley esta­blece", enfatizó Latorre. ­