El conocido “jefe de escritorio” Gerardo Soria tuvo un impor­tante aumento salarial en la Itaipú, gracias al padrinazgo del presidente de la República del Paraguay, Mario Abdo Benítez.

Soria Dávalos ingresó a la binacional sin concurso y por recomendación política del Partido Frente Guasu, el 11 de enero del 2009 de mano del actual político y senador “Kencho” Rodrí­guez ( jefe de campaña del Movimiento La Nueva República, cuya dupla de candidatos para la Presi­dencia son Euclides Ace­vedo y Jorge Querey). En el año 2014 fue despedido de la entidad y volvió a ingre­sar en el 2019 (ya durante el gobierno del actual presi­dente), cobrando por dicho efecto un valor aproximado de G. 2 mil millones, según afirman fuentes.

MILLONARIO AUMENTO SALARIAL

Conforme a datos reca­bados de los archivos publicados por la Itaipú Binacional, en enero del 2019 el “jefe de escrito­rio” cobró en concepto de remuneración la suma de 24.321.217 guaraníes. Este monto aumentó unos 152% en 4 años.

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En enero del 2023, con­forme a una planilla publi­cada por la propia Itaipú, Soria Dávalos percibió la suma total de 61.405.382 guaraníes.

A esto se debe sumar los viá­ticos mensuales (por viajar de Ciudad del Este hasta Asunción todas las sema­nas) un promedio de hasta G. 11 millones. Es decir, el “jefe de escritorio” esta­ría recibiendo de la Itaipú unos 72 millones de guara­níes mensuales, más otros beneficios sociales y com­plementarios por el cargo que actualmente ocupa.

PARA MIS AMIGOS, TODO; PARA LOS ENEMIGOS, LA LEY

Parafraseando a Benito Juárez para compren­der las ventajas de ser el bendecido del presidente Mario Abdo en la Itaipú, el “jefe de escritorio” se congració con genuflexas actitudes del director general paraguayo, quien cerró los ojos para facili­tar la progresión funcio­nal de Soria Dávalos. En 4 años, el “jefe de escri­torio” logró pasar de un simple asistente admi­nistrativo II a asistente especializado (último nivel de grado de soporte que puede ocupar en la entidad). Conforme a informaciones recabadas y en virtud de la norma de recursos humanos bina­cional de la entidad, un empleado común necesita como mínimo una anti­güedad de 16 años para lograr alcanzar esa fun­ción. Pero a Soria Dáva­los le bastó un llamado del presidente de la Repú­blica al embajador Cáce­res para que este y todo su equipo binacional de recursos humanos omi­tan la norma que rige para los otros empleados.

El “jefe de escritorio”, protegido de “Kencho” Rodríguez y Mario Abdo Benítez, ingresó por la política a la Itaipú siendo bachiller, por lo que tuvo que ser encuadrado como personal de nivel soporte, debiendo cumplir funcio­nes netamente de apoyo administrativo en la binacional, pero su con­dición de hombre de con­fianza del presidente de la República le favoreció sobre otros profesionales universitarios con mayor antigüedad y experiencia.

FUTURO AUMENTO SALARIAL

Conforme a informaciones recabadas en el Departa­mento de Recursos Huma­nos de la entidad, se encuen­tra en proceso una “planilla especial de progresión sala­rial” para los leales del presi­dente de la República, entre ellos el “jefe de escritorio”, quien estaría presionando para un aumento de más de 4 millones de guaraníes sobre lo que recibe hoy. Buscaría que se concrete antes que su protector deje la silla presi­dencial en agosto.

FUERO DE INMUNIDAD LABORAL

Recientemente, el otro amigo personal de Soria Dávalos lo deslindó de toda responsabilidad sobre la denuncia de acoso laboral y sexual que fuera instau­rada en la Itaipú. Contra toda norma de la Itaipú, y en contravención a los pro­tocolos del Ministerio del Trabajo, Empleo y Seguri­dad Social y del Ministerio de la Mujer, el director jurí­dico de la Itaipú, Dr. Juan Rafael Caballero (actual candidato a ministro de la Corte Suprema de Justi­cia), dispuso el archivo de la denuncia y plácidamente ordenó la publicación de que Soria Dávalos, supues­tamente, no tenía respon­sabilidad en la denuncia de acoso.

Para justificar su posición, el Dr. Juan Rafael Caba­llero manifestó que fueron recabadas informaciones testificales e informes del Departamento de Recursos Humanos, obviando tomar declaraciones de la denun­ciante; del denunciado e informes de los médicos que trataron a la denunciante. Claro, esto debido a evitar reunir elementos probato­rios que le pueda perjudicar al protegido del presidente de la República.

Recientemente, el otro amigo personal de Soria Dávalos lo deslindó de toda responsabilidad sobre la denuncia de acoso laboral y sexual que fuera instaurada en la Itaipú.

Conforme a informaciones recabadas y en virtud de la norma de recursos humanos binacional de la entidad, un empleado común necesita como mínimo una antigüedad de 16 años para lograr alcanzar esa función.

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