La diputada Johanna Ortega, representando a las mujeres y al sector de la juventud, habló de este primer periodo ocupando una banca en la Cámara de Baja, los desafíos y los logros que se trazaron desde julio de este 2023. Para la diputada, fue una primera etapa de aprendizaje, con el objetivo de instalar una mayor credibilidad de la instancia legislativa.

“En primer lugar, decir que para los que ocupamos por primera vez una banca en Cámara Diputados, los jóvenes que llegamos, la nueva generación digamos, es un desafío importante, porque es una Cámara que contaba ya con el mote de la Cámara de la vergüenza y nosotros vinimos a buscar transformar a partir de nuestras acciones y propuestas legislativas”, expresó en contacto con La Nación/Nación Media.

Agregó que más allá de las minorías y las mayorías de representación, el primer objetivo fue aprender el respeto y la tolerancia entre los colegas. “Fuimos sorteando estos meses tratando de entendernos más allá de las diferencias políticas y de poner al país primero, diferencias en términos de proyectos por supuesto que los hubo, desde el sector opositor sobre todo con el oficialismo, me parece que es natural”, manifestó.

Por otra parte, reconoció que el mismo bloque opositor no se encuentra en sintonía en un 100 %, sin embargo, se busca las coincidencias que puedan llevar adelante temas de interés para la sociedad. “Al ser un bloque de nueve, del tercer espacio, que reconozco no es tampoco homogéneo, venimos de distintos sectores, de distintos partidos, y por ende con distintas ideas también, y distintas prioridades de nuestra agenda legislativa, además de la dificultad de congeniar nosotros, por supuesto que nos encontramos con la dificultad numérica”, refirió.

La diputada refirió que no todo es confrontación entre los sectores políticos que conforman la Cámara Baja, destacando que también se llevaron adelante proyectos e iniciativas en coincidencia entre la oposición y el oficialismo. “También quiero recalcar que sobre los proyectos más controversiales o polémicos, que es lo que más se ve en los medios de comunicación, claro, hay distintas posturas y eso es natural en una democracia. Pero, hay un montón de temas que al no ser tan polémicos no se ven, porque son los más antes que los menos, muchas veces votamos de manera unánime y logramos grandes acuerdos”, apuntó.

Uno de esas grandes propuestas, fue el control de las expropiaciones, que también causó polémica en su momento, sin embargo, se logró un gran acuerdo. “La Cámara, por ejemplo, tuvo un proceso de revisión de temas de expropiación donde hemos logrado trabajar oposición, el tercer espacio, el partido, las bancadas del partido colorado juntas y hemos frenado algunas expropiaciones que tuvimos irregulares, incluso con abstenciones unánimes para pedirle el veto al presidente Santiago Peña, es decir, hay muchos proyectos que nos encontraron trabajando juntos también”, aseveró.

Mientras tanto, aseguró que seguirá con su postura firme de oposición, pero buscando siempre en respeto entre todos los colegas. “Por supuesto hay cosas que yo critico, mi opción opositora y mi convicción hacen que yo critique algunas formas, yo tuve un cruce muy fuerte con Yamil Esgaib, por ejemplo, porque está pidiendo todo el tiempo cierre de debate o cierre de listas de oradores, porque prejuzga lo que otro colega va a opinar, hay perlitas como esas”, sentenció.

Ortega destacó además el rol conciliador del presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre, en este proceso de integración entre los legisladores. “Más allá de eso destaco el espíritu democrático del presidente de la Cámara, que debo reconocer que es una persona que trató siempre de mediar esas cuestiones, y fuimos también muy firmes en cómo vamos a manejarnos en término de respeto entre los colegas”, puntualizó.