La Juventud Liberal Radical Auténtica (JLRA) insistió en que las finanzas del Instituto José P. Guggiari, tienen sospechas de uso indiscriminado de los fondos de esta institución. El sector juvenil solicitó al presidente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), Hugo Fleitas, un corte administrativo, como así también la intervención de la Contraloría General de la República (CGR), sobre el manejo financiero del instituto en cuestión.

“Como Juventud hemos solicitado de forma concreta al presidente Hugo Fleitas que realice un corte administrativo, que sea realizado por la Contraloría General de la República, a los fines de que podamos tener acceso desde su creación hasta esta parte, en qué se invirtieron los recursos económicos que son públicos, son impuestos que paga la ciudadanía”, expresó en conferencia de prensa Carlos María Aquino, titular de la JLRA.

Aquino indicó que la misma solicitud ya se realizó en la presidencia de Efraín Alegre, sin embargo, no tuvieron respuestas. “Bajo la presidencia de Efraín Alegre, expresidente del partido, habíamos remitido un pedido de informe y nunca tuvimos respuesta respecto a estos manejos”, señaló en entrevista para el canal GEN/Nación Media.

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Pagos millonarios

Por otra parte, Dylan Carreras, también miembro de la JLRA, detalló que accedieron a informes de pagos millonarios a personas que realizaron cursos en el instituto, que rondarían en los G. 300 millones, pero que no se han justificado.

Nosotros hemos accedido a extractos del Banco Nacional de Fomento de transferencias que ha realizado el instituto a cuentas privadas, en las cuales tenemos, entre varias, a dos personas que desde el 2019 hasta el 2021 hicieron 12 cursos y han cobrado en total, una de las personas 123 millones (de guaraníes) y la otra persona ha cobrado 49 millones (de guaraníes) por 6 cursos”, detalló.

Explicó que en año 2019 se registró que Marlene Tatiana Orué recibió alrededor de G. 31 millones, por tres cursos realizados en el instituto. “Es algo aberrante que no sucede en ninguna parte del país. La situación catastrófica en la que se encuentra la edificación del Instituto José P. Guggiari, que está totalmente abandonado, sin equipamientos, y vemos que un platal se gastó en cursos de capacitación que no sabemos dónde se hicieron”, refirió Carreras.

Contó además que en una gran mayoría las transferencias se realizaron por el monto de G. 20 millones, llegando a alrededor de G. 300 millones. “Tenemos trasferencia de 20 millones y de varias sumas y cantidad a personas que no sabemos con qué función se transfirió esa plata. Son casi 300 millones aproximadamente”, sentenció.

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