El Ministerio de Salud Pública es una de las carteras más delicadas para el gobierno que asumirá desde el próximo 15 de agosto, lo que demuestra que el presidente electo Santiago Peña haya decidido cambiar la designación inicial del doctor Felipe González para el cargo, tras desafortunadas declaraciones que indignaron a pacientes oncológicos.

“La política ha sido muy atacada y muy desprestigiada. Pero la política te da esa sensibilidad, te da ese contacto, ese tacto con la gente, entonces claramente el conocimiento técnico es fundamental”, comentó Peña, este martes, consultado sobre la definición del Ministerio de Salud, durante su asistencia a la inauguración del Centro de Investigación de Laboratorios Lasca.

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“Yo no tengo ninguna duda de la idoneidad del doctor Felipe González, él es una persona de una conducta intachable. Realmente yo estaba muy entusiasmado”, explicó el futuro mandatario, horas antes de un viaje a Brasil. “Pero claramente el desafío que estamos enfrentando es un desafío enorme, hay muchísimos intereses y hay muchísima sensibilidad en ese proceso, así que le he pedido que siga colaborando con nosotros, con el Gobierno, pero probablemente desde una posición diferente a la de ministro”.

Acerca de la nueva designación que se aguarda, respondió: “Nos tomaremos el tiempo para encontrar a un hombre o a una mujer que pueda estar al frente de una cartera tan sensible, pero sí adelantar que yo ya pensaba involucrarme en la gestión de la salud pública, hoy les puedo garantizar que me voy a involucrar más todavía en la conformación de los equipos y en los trabajos que se van a llevar adelante”.

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Por otra parte, Peña explicó que en su futuro gabinete estará rodeado de personas que conoce y profesionales que han demostrado su idoneidad, recordando que ya estuvo en el Gobierno nacional, como ministro de Hacienda y como director del Banco Central del Paraguay, por lo que la conformación de su equipo considera a candidatos con experiencia en las políticas públicas y privadas.

“Tengo poco tiempo, tengo un sentido de urgencia, y ese sentido de urgencia me va a llevar a tener que hacer cambios si hacen falta. Claramente no es lo deseable, no es lo normal tener que cambiar a una persona que ha sido designada y ni siquiera ha asumido. Tengo hoy la posibilidad de llevar adelante la gestión del Poder Ejecutivo, habiendo conocido los problemas del Paraguay, yo no tengo tiempo para aprender de los problemas, lo que tengo que hacer es generar soluciones para que la gente sienta lo más rápido posible”, resaltó el economista que gobernará al Paraguay.

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