El presidente del Colegio de Abogados del Paraguay, Manuel Riera, resaltó el posicionamiento de la Iglesia contra el actual desempeño del sistema de justicia, al realizarse mención respecto a la falta de credibilidad ciudadana durante la misa central por las festividades de la Virgen de Caacupé.
“Las homilías suelen ser más genéricas, suelen referir a la justicia en términos abstractos; sin embargo, acá se habló de la crisis de la Corte Suprema de Justicia, de la confianza ciudadana, esto no deja de ser un tema menor, fue una homilía relevante”, manifestó en una entrevista con Unicanal.
El obispo Ricardo Valenzuela se refirió a la administración de la Justicia sosteniendo que la ciudadanía es testigo de un reciente escándalo que afecta al más alto nivel de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y que la corrupción es la punta de un sistema desfasado y poco confiable, en referencia al escándalo que involucra al ministro Antonio Fretes y a su hijo Amílcar Fretes Escobar. Incluso, el religioso fue contundente en solicitar la renuncia del magistrado.
“Me llamó mucho la atención de la homilía al enfatizarse que lo político y lo social no puede disociarse, se hizo primero como una justificación etimológica y luego se le metió a la Iglesia como un actor más, por supuesto la Iglesia no aspira a tener una idea dogmática, la única idea, pero nadie puede negar que es un jugador importante en la política paraguaya no solo ahora, sino siempre”, indicó.
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El caso cuestionado desde la Iglesia se centra en un pago equivalente a un total de 368.000 dólares que recibió el hijo del titular de la máxima instancia judicial por parte del brasileño de origen libanés Kassem Mohamad Hijazi para evitar su extradición a los Estados Unidos.
“La Iglesia, quiérase o no, es hoy en día posiblemente la entidad que tiene mayor credibilidad en el país, así como se tiene un Poder Judicial con poca credibilidad. Esto no es un tema menor, hay una posición consciente de la Iglesia en hacer saber esto, de escribir esto y tomar partido sobre la realidad nacional y señalar como nunca que la honorabilidad está puesta en juego en lo que se llama la crisis de la Corte Suprema de Justicia”, sostuvo.