Para el censo nacional 2022, a realizarse el próximo 9 de noviembre, se convoca a unas 210.000 personas, entre censistas y supervisores, cifra que supera ampliamente al número de colaboradores que fueron convocados en el censo del 2012, en esa ocasión la cantidad era de unas 7.300 personas, 6.000 de ellas para el rol de censistas y 1.300 para el cargo de supervisores; es decir, se contratará a 29 veces más personas para esta actividad que coincide con un año electoral y para la cual se va a destinar un crédito del BID de US$ 43 millones.

Para el censo del 2022 se convocan a unas 202.700 personas más de las que se precisó en el censo del 2012, este hecho genera suspicacia dada la proximidad de las elecciones internas del próximo 18 de diciembre, y despierta sospechas de un posible despilfarro de un millonario préstamo internacional. Los censistas, supervisores y los jefes distritales percibirán remuneraciones, además de viáticos en el marco de la realización del censo.

Los supervisores de cada zona cobrarán un monto de G. 1.000.000, los jefes distritales recibirán G. 6.000.000 por tres meses de trabajo y los jefes zonales la suma de G. 5.000.000. En el caso de los supervisores en zona urbana van a percibir G. 200.000 por viático y cada censista de zona urbana recibirá G. 100.000. En caso de zonas rurales, el monto a recibir asciende a G. 500.000, mientras que el supervisor va a tener un viático de G. 1.000.000, esto de acuerdo a lo expresado ante los medios de prensa por Iván Ojeda, titular del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Invitación al canal de WhatsApp de La Nación PY

Lea también: Aumentar el presupuesto con iniciativas legislativas afectará al PGN 2023, advierten

Esta mayor cantidad de censistas también exige destinar una mayor cantidad de recursos. De acuerdo a publicaciones oficiales de la época, para la realización del censo del 2012 se realizó un préstamo, también del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), pero este fue solo de US$ 12,5 millones; es decir, la contratación de un préstamo de US$ 43 millones para esta ocasión significa que el gobierno de Mario Abdo Benítez gastaría un 71% más de lo que se gastó hace 10 años atrás.

La excusa detrás de esta multitudinaria convocatoria de personas es que el censo será realizado en un solo día, a diferencia del censo del 2012, cuando el registro se extendió por varias semanas; sin embargo, existe el temor de que esta actividad se termine politizando y sea utilizado por el oficialismo para obtener rédito político mediante el arreo masivo de personas para trabajar en el censo.

Este no sería el primer caso de oportunismo político, dado que en los últimos tiempos ha habido un gran número de denuncias por persecuciones políticas y uso de recursos públicos para la campaña de los candidatos a la Presidencia de la República del mandatario Mario Abdo Benítez, la dupla conformada por Arnoldo Wiens y Juan Manuel Brunetti.

En noviembre del año pasado, el Congreso Nacional aprobó el préstamo de US$ 43 millones para la realización del censo, cifra que se suma al millonario endeudamiento de Paraguay que en agosto de este año, de acuerdo a los datos publicados por el Ministerio de Hacienda, ascendía a US$ 14.450 millones, lo que representa un 35,3% del producto interno bruto (PIB) y que es alertado por expertos en economía como un límite peligroso para el país.

Le puede interesar: Sumario en Copaco por faltante de lubricantes está suspendido mientras Fiscalía investiga daño patrimonial

Déjanos tus comentarios en Voiz