El senador Fernando Lugo logró mantenerse estable desde la última intervención a la que fue sometido en la noche de ayer, de acuerdo al último reporte médico. El mismo aún permanecerá bajo coma inducido y con respirador durante las próximas horas.

El senador Jorge Querey, colega y médico de cabecera de Lugo, esta tarde brindó un nuevo reporte del estado de salud desde el Sanatorio Migone donde permanece internado en terapia intensiva.

Según mencionó, lo que hoy están haciendo es “sostener una situación de estabilidad”, tanto desde el punto de vista neurológico como desde la cirugía que fue hecha a la medianoche.

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Todos los monitoreos tanto por aparatos como clínicos permanecieron estables, además que las funciones orgánicas (cardíaca, renal, gastrointestinal) también se mantuvieron en iguales condiciones, precisó.

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“Todos los especialistas están haciendo lo suyo protegiendo el cerebro, los neurocirujanos, neurointensivistas, el equipo médico del instituto cardiovascular”, manifestó en entrevista con los medios.

Querey explicó que se requieren al menos 48 a 72 horas y a partir de ahí estarían evaluando la estabilidad de la cirugía en sí misma. A estas horas, Fernando Lugo “no tiene nuevas situaciones preocupantes”, sostuvo su médico de cabecera y colega en el Senado.

Pese a ello, recordó que al tratarse de un paciente crítico internado en cuidados intensivos siempre existe riesgo de que sufra alguna eventual complicación u otras dificultades, por lo que deberán estar en alerta para analizar cómo prosigue su evolución.

Al ser consultado sobre si logró detenerse el sangrado, confirmó que actualmente no hay signos de que haya vuelto a tener este inconveniente. “Son los riesgos que se corre siempre en una cirugía del cerebro”, agregó.

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Querey recordó que el día de ayer Fernando Lugo tuvo una “evolución compleja y preocupante”, pues de tener una lesión pequeña la situación se agravó hasta llegar a una proporción más considerable, lo cual obligó a los profesionales del Migone a someter al expresidente de la República a una intervención endovascular.

“Es positivo que tengamos 18 horas sin signos catastróficos preocupantes, pero todavía no nos sirve para establecer un pronóstico”, admitió Querey, quien dijo que esto aún no les permite opinar sobre la evolución futura de Lugo.

El senador del Frente Guasu enfatizó que hasta el momento “están en los resultados esperados”. Durante los próximos días, Fernando Lugo seguirá sedado, bajo coma inducido y con asistencia mecánica respiratoria.

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