La queja generalizada en el este del país, una zona netamente comercial, es lo que en estos últimos días se está agudizando, por lo que se critica la posición de “encierro” al que fueron sometidos durante estos meses, sin tener la consideración de que el 90% de la población se vería afectada y no se previó una solución, según sostienen.

“La gente de Asunción dice enciérrense todos, la única institución fuerte que viene trabajando es la gobernación, el resto nos dijo: enciérrense todos”, lamentó el gobernador de Alto Paraná, Roberto González Vaesken en contacto con Universo 970.

Mencionó sobre la reunión que tendrá con las autoridades estatales, para ponerse de acuerdo en las medidas que estarán siendo implementadas para la reapertura del Puente de la Amistad en Ciudad del Este. El anuncio se dio hoy por parte del Gobierno, la fecha se deberá coordinar con el presidente del Brasil, Jair Bolsonaro.

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La conciliación entre la parte de salud y parte comercial es la que falta, mencionó. “Mañana hablaremos y siempre digo que hay que cumplir el protocolo”, añadió.

La fecha estimativa para darse la reapertura es incierta, pero el líder departamental cree que sería entre el 26 o 28 de septiembre, atendiendo a que el presidente brasileño había dado esa fecha para la habilitación del puente.

“Yo creo que hay que pasar por fases de apertura y que ingresen más personas. Que se haga una evaluación cada 72 horas”, indicó González. También se refirió a la visión mundial que se está dando, “el mundo se está empezando a abrir, pero no bajemos la guardia. Hay que trabajar por la concientización”, sostuvo.

Igualmente, es consciente de que los cuidados deben de ser estrictos y todos deben ser custodios de los que se ha logrado en materia de propagación del virus para evitar que se vuelva a un gran porcentaje de contagio del COVID-19 en el este del país.

Por último, dio por sentado de que no se tendrá un gran volumen de circulación de turistas paras las compras, porque la situación regional luego de la pandemia es delicada, incluso teniendo en cuenta que la moneda del Brasil, el real, también está pasando por un mal momento, lo que impediría que el flujo comercial sea en mayor proporción.

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