Luego de presentarse ante el Juzgado Penal de Garantías se levantó la orden de captura que pesaba sobre el diputado Tomás Rivas que cuenta con libertad ambulatoria por el juez Raúl Florentín, este lunes. Sin embargo, sobre el parlamentario colorado aún se mantienen medidas sustitutivas como prohibición de salida del país y se le sancionó con el pago de una fianza de Gs. 100 millones.
El parlamentario está acusado de cobro indebido de honorarios en calidad de cómplice y estafa en calidad de autor en el caso conocido como “caseros de oro”.
"Se mantienen las medidas alternativas, con prohibición de salida del país y libertad ambulatoria. No hay una situación de rebeldía, por eso el juez dejó sin efecto tal hecho”, expresó el abogado Jorge Bogarín González.
Esta mañana, Rivas se presentó luego de que el juez Florentín haya declarado en rebeldía al congresista por no presentarse a la audiencia en el Poder Judicial, el pasado viernes. El diputado argumentó que sufrió problemas de salud y contar con 72 horas de reposo.
En consecuencia, un médico forense, enviado por el Poder Judicial, se acercó hasta el domicilio de Rivas para corroborar si sufría problemas de salud, pero se equivocó de dirección de la casa, lo que supuestamente derivó en la orden de captura, según Bogarín. “Con toda mala intención el médico forense se fue a otra dirección y no a mi casa”, afirmó Rivas al salir del juzgado.
Esta decisión por parte del juez se da luego que el médico forense del Palacio de Justicia confirmó que Rivas sufre problemas renales, en consecuencia se levantó la rebeldía y la captura en su contra.