El presidente de la Cámara de Diputados, Miguel Cuevas, manifestó este miércoles que es un perseguido político y se declaró inocente, pese a que el origen de sus bienes son poco claros. Desatacó que cuenta con el apoyo de la gente de su departamento, Paraguarí.
“Vamos a estar explicando todo como corresponde. Más que inocente soy, un perseguido ¿Por qué tengo que renunciar si soy inocente? Yo no dilato nada, estoy a disposición de la justicia”, dijo el legislador a los medios de prensa.
Sostuvo que todas las publicaciones sobre sus propiedades son mentiras y que su familia tampoco es adinerada. Destacó que él tiene 202 hectáreas de tierra en el departamento de Paraguarí, que ya incluye el adelanto de la “herencia” a su hijo.
“No hay motivos”
Indicó que su hijo cuenta con un inmueble de 35 hectáreas, dimensiones que a su criterio es “poquísima en la campaña”, haciendo referencia al interior del país. Destacó que no hay motivos para su imputación pero que en caso de ser así, pedirá permiso a la presidencia de la Cámara Baja y luego su desafuero para someterse a las justicia.
“Si la Fiscalía me imputa, primero voy a pedir permiso a la presidencia y luego mi desafuero para ponerme a disposición. No hay motivos (para su imputación), le estoy mostrando a propios y extraños, más todavía a la Fiscalía, con documentos”, agregó.
La investigación contra Cuevas ingresa en una nueva fase con la inclusión de dos agentes caracterizados en los temas referidos a corrupción, como son René Fernández y Liliana Alcaraz, al apartarse Irma Llano por motivos de salud.
Varios allanamientos se realizaron días pasados por el Ministerio Público en propiedades del presidente de la Cámara de Diputados, quien es investigado por los supuestos hechos de enriquecimiento ilícito, lesión de confianza y cobro indebido de honorarios de la esposa del mismo. La Fiscalía detectó un total de 14 inmuebles que pertenecen al legislador, tras acceder a su declaración jurada de bienes.