Una cumbre de poderes con la Iglesia Católica se realizó este viernes 2 de noviembre, en sede del Arzobispado de Asunción. Durante el encuentro se analizó una solución definitiva a la problemática del Bañado; Franja Costera y la crecida de las aguas. Las autoridades firmaron un acuerdo de cooperación en vista a dar respuestas.

De la reunión intersectorial participaron el presidente Mario Abdo, el arzobispo metropolitano Monseñor Edmundo Valenzuela, el coordinador de la Pastoral Social Arquidiocesana Ricardo González, la Directora de Derechos Humanos de la Corte Suprema de Justicia Nury Montiel; el Intendente Mario Ferreiro y el presidente de la Junta Municipal, Oscar Rodríguez.

El edil capitalino mencionó que la población que vive en los bañados de todo el país, especialmente en Asunción y toda la sociedad paraguaya, soportan nuevamente este año los efectos de la crecida del río Paraguay. Recalcó que eso demuestra que la situación requiere soluciones estructurales profundas y de alto impacto. Manifestó también que la atención de la emergencia es una cuestión de Estado en todos sus niveles de gobierno e instancias operativas, pero que no suponen una solución a la problemática.

“El Plan Maestro de la Franja costera de Asunción es la propuesta de proyecto que ofrece una solución integral, sostenible, definitiva y para todos”, dijo Mario Ferreiro y recordó que está aprobada por ordenanza municipal. Agregó que para fortalecer la relación con el río Paraguay -mediante espacios públicos que den alivio al “deterioro del patrimonio natural”- el PMFC debe desarrollarse en su totalidad.

“Cada inundación tiene un enorme costo social, ambiental, financiero y económico”, enfatizó monseñor Edmundo Valenzuela. El Arzobispo de Asunción declaró que debe ser una decisión política el poder contar con un proyecto inclusivo para cuya concreción sería imprescindible la creación de un mecanismo de gestión interinstitucional, cronogramas y financiamientos bien definidos.

Hizo referencia al Bañado de Tacumbú en donde están asentadas más de 2000 familias en situación de pobreza y marginación. La implementación de la Franja Costera en esa zona podría -según el religioso- convertirse en modelo si durante su ejecución y tras su finalización logra mejorar la calidad de vida de los afectados. “El objetivo debe ser más ambicioso que el de convertir al bañado en un barrio no inundable”, aclaró e incluyó salud, educación y capacitación como elementos que deben estar contemplados.

Arnoldo Wiens, ministro de Obras Públicas y Comunicaciones explicó ante los medios que se está terminando de refular donde van a ubicarse las primeras 800 viviendas que van a cobijar a las personas afectadas en la primera parte de la construcción.

“Primero las viviendas dignas que necesita la población y después la costanera. (...) Va a ser a la inversa de lo que se hizo en Costanera Norte. Estamos abordando con rostro social”, sostuvo. El SNNPP está trabajando en capacitación porque según Wiens, son los pobladores los que trabajarán en el proyecto y serán “artífices de su hermoso futuro”. Habló de 100 millones de dólares de inversión y un involucramiento del BID.

Wiens no mencionó plazos exactos de concreción, aunque señaló que llevará años.