• Por Emerson Dutra
  • Corresponsal, Pedro Juan Caballero

La Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) encontró tres fusiles de la marca HK de diferen­tes calibres, armas de guerra cuyo uso es exclusivo de las fuerzas de seguridad de nues­tro país, durante un allana­miento realizado ayer viernes en un establecimiento rural ubicado en la colonia Lorito Picada de la ciudad de Cerro Corá, Amambay.

Durante el operativo fue detenido Claudemir Valerio da Silva, responsable del inmueble, además de Julio César de Souza Júnior, de nacionalidad brasileña, y José Domingo Ramírez Centurión. Además de los fusiles, fueron decomisados dos revólveres de la marca Taurus y numerosos cartu­chos, según se comunicó.

Informes revelan que los agen­tes de la Senad allanaron el sitio ante informaciones que en el lugar había gran can­tidad de drogas. “Teníamos informaciones de que había en el terreno drogas ocul­tas en fosas”, revelaron los intervinientes. Sin embargo, al inspeccionar el terreno no hallaron sustancias estupe­facientes, sino que armas de fuego de grueso calibre.

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El abogado Cristian Colmán dijo que las armas cuentan con documentos respaldato­rios. “Mi cliente es propieta­rio de una empresa de seguri­dad y las documentaciones de las armas vamos a presentar al Ministerio Público”, señaló el profesional del derecho.

CIUDAD EL ESTE

En la ciudad de Foz de Yguazú, Brasil, realizaron allanamien­tos en residencias particulares y tres policías militares brasi­leños fueron detenidos en fla­grancia en la operación que investiga a agentes envueltos en el desvío de mercaderías decomisadas en la frontera, procedentes de Paraguay.

La operación denominada “Punto de honra” fue del Ministerio Público, por medio del Núcleo de Foz de Yguazú, del Grupo de Actuación Espe­cial de Combate al Crimen Organizado (Gaeco) y la Ins­pección General de la Policía Militar del Estado de Paraná, Brasil. Es lo que divulgó el Ministerio Público de Paraná.

Los allanamientos fueron ayer 15 de agosto en investigación de la “posible práctica de los crímenes de organización cri­minal, malversación, desvío, prevaricación y falsedad ideo­lógica por agentes públicos”, según el reporte de la Fiscalía.

Fueron cumplidas “cuatro órdenes de búsqueda y apre­hensión”, como también “tres de separación de la función pública, además de otras medi­das cautelares en direcciones vinculadas a tres policías mili­tares de Foz”. Las acciones fue­ron realizadas con el apoyo del Batallón de la Policía Militar de Frontera (BPFron), de la men­cionada ciudad.

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