El martes 8 de agosto pasado, una mujer presentó una denun­cia ante la Comisaría 22.ª de Coronel Oviedo, departa­mento de Caaguazú, por vio­lencia sistemática por parte de su marido. El caso pasó a ser investigado por la Uni­dad Fiscal n.º 5 de la citada ciudad, a cargo de Édgar Modesto Torales, quien imputó al denunciado por violencia familiar y pidió la detención preventiva.

El procesado está identifi­cado con el nombre cuyas iniciales son M.M.R.F., de 35 años, mientras que la víctima tiene las iniciales M.L.S.A., de 37 años, y es madre de tres hijos, quienes también fueron víctimas de violen­cia. De acuerdo con el cir­cuito cerrado de grabación y relatada en la denuncia, la agresión última ocurrió en el local comercial, propiedad de la pareja, y en la misma, el hombre golpeó, pateó y ame­nazó a su esposa.

La golpiza se interrumpió cuando intervino su her­mano, tras romper una puerta de vidrio para ingre­sar al recinto y tratar de apaciguarlo, que finalmente pudo hacerlo, pero los veci­nos llamaron al Sistema 911, cuyo personal llegó hasta el sitio, pero el agresor pudo escapar.

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En fecha 9 de agosto, el agente del Ministerio Público pidió la detención preventiva del hombre a la Dirección de Policía del departamento de Caaguazú, pero luego “dejó sin efecto la orden de detención, llamativamente, habiendo evidencias contun­dentes para que el hombre sea detenido y confirmada su pri­sión”, según el abogado de la denunciante, Balbino Torres, contactado por La Nación/Nación Media.

El abogado explicó que exis­ten imágenes irrefutables en videos, documentos de inspección médica, men­sajes en el aparato celular y demás evidencias en con­tra del denunciado y “no se entiende cómo es que se levantó la orden de detención preventiva y el hombre sigue libre”. Consultado sobre esto por La Nación, el fiscal Édgar Torales dijo: “El hombre está imputado y con pedido de prisión”, rechazando la acu­sación del representante de la víctima.

Por el auto interlocutorio n.º 268 del 9 de agosto, el juez de Paz de Coronel Oviedo Euge­nio César Cataldo otorgó medidas de protección a la mujer, así como prohibición de acercamiento y exclusión del hogar y del comercio con­tra el supuesto agresor.

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