Ciudad del Este. Agencia regional.
Una banda delictiva, integrada por ocho hombres aproximadamente, asaltó ayer de madrugada un local comercial y tras reducir a los guardias llevó mercaderías por 5.000 dólares y dinero en efectivo, unos 15.000 dólares. Fue lo que reportó Iván Nabih Sein, ciudadano brasileño de 24 años, quien dijo ser el propietario del local violentado, Shopping Stores.
Intervinieron agentes policiales de la Comisaría 1.ª del barrio San Agustín. Fueron víctimas Roberto Carlos Riveros Gómez (46) y Sergio Carballo Servián (26), ambos guardias de seguridad de la empresa SAG.
Los mismos manifestaron que un grupo de hombres desconocidos, ocho aproximadamente, los redujeron y despojaron de sus respectivas armas de fuego y luego violentaron el local comercial, de donde sustrajeron las mercaderías y el dinero mencionado. El hecho fue a las 4:00 en la galería Jebai Center, ubicada sobre la avenida Carlos Antonio López y Monseñor Rodríguez, en el microcentro esteño.
Los 15.000 dólares robados supuestamente se encontraban en la caja registradora de la casa comercial, según lo declarado por el propietario al personal policial. La banda delictiva se apoderó también de una escopeta de la marca Maverik, calibre 12 y un revolver calibre 38, de la marca Taurus.
Personal de los departamentos de Investigaciones, a cargo del oficial 1.º David Verón, y de Criminalística, a cargo del suboficial inspector Marcos González, se sumaron a la investigación del caso que fue reportado al fiscal de turno Luis Trinidad, quien dispuso que los antecedentes sean remitidos a su unidad fiscal.
En el circuito cerrado de grabación se pudo observar a seis hombres, todos con vestimenta, con capucha y portaban tapaboca, con armas largas y cortas; al reducir a uno de los guardias, lo tiraron al piso frente al local, boca abajo y uno de los delincuentes lo controlaba pisando al personal de seguridad y portando arma larga.
Consultado por La Nación/Nación Media, el jefe de la Comisaría 1.ª, comisario Bernardo Ojeda, dijo que el local asaltado tiene su puerta hacia la vereda de los casilleros y llamó la atención que una vez violentada la puerta grande, la vidriera no haya estado con candado, así como la cantidad de dinero dejada en una caja registradora y no una caja fuerte.
Explicó también que con el personal de Investigaciones de la Policía Nacional en Alto Paraná se está buscando a través de otros circuitos de grabación datos que ayuden a saber de qué manera llegó la banda al lugar, en qué vehículos y demás datos.