- Por Viviana Orrego
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El Bañado Tacumbú de Asunción fue el lugar elegido por monseñor Adalberto Martínez Flores, arzobispo de Asunción, para oficiar su primera misa como cardenal en el país. La noticia tomó por sorpresa a la humilde gente de este barrio, pero se prepara con todo para recibir a su eminencia reverendísima el próximo domingo 4 de setiembre en la capilla San Miguel y en la parroquia San Felipe y Santiago.
En el barrio viven con el estigma de la marginalidad, la pobreza y la delincuencia, pero con la visita del cardenal quieren mostrar su otra cara, la de la gente con compromiso y con ganas de salir adelante, superando todo lo malo con esfuerzo, dedicación y fe porque es un barrio católico, con convicción de vencer la pobreza.
Marlene González, bañadense de nacimiento, es integrante del coro Cantemos al Señor de la parroquia San Felipe y Santiago del Bañado Tacumbú, y es una de las 12 personas que normalmente ensayan y cantan en las celebraciones eucarísticas del vecindario. Adelantó que al coro, por la ocasión especial, se integraron como 25 personas más, entre ellos integrantes de la Escuela de Música del Centro de Ayuda Mutua Salud para Todos (Camsat), los catequistas y personas que decidieron apoyar.
“Me siento muy emocionada, la venida del cardenal fue una noticia bastante importante para nosotros. Vamos a mostrar la otra cara del barrio, acá hay gente capaz, hay gente que lucha por sus sueños, tenemos muchos proyectos y en la misa vamos a dar a conocer. Hay muchos aspectos que la gente externa a los bañados no conocen, hay gente que da su vida por el barrio y esos y muchos aspectos más necesitan ser visibles”, dijo González en comunicación con La Nación/Nación Media.
La visita del cardenal al Bañado, además de representar una enorme alegría y mucha emoción, es una honra y orgullo para los ribereños, ya que por lo trascendental que es la primera misa como cardenal en el país pudo haberla celebrado en la Catedral de Asunción o en la Basílica de Caacupé, por contar con todos los elementos necesarios, pero que haya elegido el Bañado Tacumbú es un verdadero halago para su gente.
“Estamos ensayando 12 canciones más o menos, son las que van a seguir el hilo de misa, en la entrada, la penitencia, el momento de gloria. Tenemos un compromiso muy grande porque la Catedral de Asunción cuenta con su coro. El padre Pedro Velasco sugirió que el coro del barrio acompañe la misa, ya que el cardenal eligió al Bañado, por lo que nuestro grupo de coro va estará presente, representa un gran compromiso”, indicó.
Agregó que si bien la ansiedad, el nerviosismo, la emoción y la alegría se apoderan de ellos debido a esta grata sorpresa del cardenal para con la gente humilde, lo toman con mucho compromiso, esperando que Martínez Flores también vuelva sorprendido por la calidad y calidez de las personas de este lugar.
“Estamos ensayando intensamente ya para animar la misa de ese día y vamos haciéndolo muy bien. Estamos muy felices, vamos a cantar las canciones que normalmente cantamos en la misa del barrio, hay canciones en guaraní también, que son parte de nuestro repertorio normal, son canciones muy lindas y, sobre todo, conocidas por la gente de nuestro barrio que acompañará cantando”, dijo.
Para ese acontecimiento especial y memorable no solo para el Bañado Tacumbú, sino también para el Paraguay, por ser la primera misa que el cardenal paraguayo oficiará a nivel nacional, los integrantes del coro vestirán una remera de color amarillo que los distinguirá del pueblo. Estarán a un costado del cardenal y el padre Pedro durante la misa.
“Generalmente, en el coro usamos solo la guitarra y la pandereta, pero para esta ocasión vamos a contar con una caja acústica, violines de la Escuela de Música. Todos los integrantes del coro somos del Bañado; en mi caso, yo nací en este barrio, también nos ayuda gente de la Crucecita, que no son del barrio, pero siempre están apoyando, compartiendo con nosotros”, refirió.