Mediante un trabajo conjunto entre la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y la Policía Federal del Brasil se lograron destruir más de 600 toneladas de marihuana en la zona fronteriza entre Paraguay y Brasil.

El pasado 10 de agosto se daba inicio a una serie de incursiones como parte del operativo Nueva Alianza XXXIII, llevado a cabo por la Senad, la Policía Federal del Brasil, con apoyo de la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y el Ministerio Público a través del fiscal Celso Morales. Las labores se focalizaron en zonas de incidencia del tráfico de marihuana como Cerro Kuatia y Rosalina, en el departamento de Amambay, región del país donde este negocio se mantiene en auge. Durante estas operaciones en campo se lograron erradicar 197 hectáreas de marihuana, equivalentes a 591 toneladas de la hierba que no han ingresado al circuito de tráfico nacional ni regional.

De igual manera, se detectaron y destruyeron un total de 56 campamentos que ofrecían lo necesario para emplear la custodia y la producción de toneladas de cannabis. En dichos establecimientos se conservaban 19.000 kilos de cannabis. En resultados globales, la operación dejó a su paso la anulación de 610 toneladas de la droga y un daño económico a las organizaciones criminales con cifras que rondan los US$ 18 millones.

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