Hace 30 años, la calle Ana Díaz está ocupada por comerciantes bolivianos que venden productos tradicionales. Desde el viernes pasado se conocieron tuits del director del Mercado 4, Juan Villalba, en los que señala una supuesta irregularidad por parte de estos comerciantes. En contacto con canal GEN, Villalba dijo que se tienen que tener en cuenta que mucha gente habla de xenofobia y discriminación, pero que esto no es así.
“Esto podía haber ocurrido con un paraguayo, coreano, libanés, con quien sea, siempre y cuando se incumplan lo que establecen las normas y leyes. En un recorrido realizado el sábado hemos divisado tres grandes negocios que ocupan de frente aproximadamente de 20 a 25 metros de entrada y otra vez ocupan espacios frente a estos negocios en la vereda entre 27 a 30 metros cuadros sin permiso municipal y sin pagar canon, con una actitud totalmente prepotente”, expresó. Ayer señaló que los comerciantes bolivianos podrían ser desalojados a causa de supuestas irregularidades administrativas, como deudas en el pago de canon por ocupar los espacios sobre la calle Ana Díaz, principalmente los permisionarios ubicados sobre la vereda.
Villalba mencionó que se pidió la intervención del Ministerio de Trabajo, de Hacienda y de la Dirección de Migraciones para corroborar la situación de los bolivianos que están trabajando en zona de la calle Ana Díaz del Mercado 4 de Asunción. El director denunció también un intento de agresión de los permisionarios.
VERSIÓN DE TRABAJADORES
Por su parte, los comerciantes afectados indicaron que cuentan con todos los documentos correspondientes y resaltaron la presunta prepotencia con la que actuó el director del Mercado 4 ante acusaciones de que supuestamente trabajan de manera irregular. “El encargado de la municipalidad nos atropella bastante. No nos habla como seres de verdad, viene a gritarnos. Tengo adjudicación y todos los documentos en regla. Tengo todo al día, no le entiendo a este señor, bien prepotente. Olor a tufo estaba y yo dije: ‘¿Este señor qué tiene?’. Le pregunté qué pasaba y todo muy prepotente cabezazo me quería dar, ahí vino mi hermano y le dijo: ‘A mi hermana no le vas a tocar’, entre empujones y esto generó incidentes”, expresaron los permisionarios afectados. “Nos discriminó a todos los bolivianos. Dijo que somos unos bolivianos muertos de hambre que venimos nosotros acá a robar plata. Como autoridad, él debería venir a hablarnos como se debe pero vino a medir el espacio, a gritar y querer pegarle a mi hermana. Queremos llegar a un acuerdo de buena manera, no queremos faltar el respeto a nadie. Agradecemos a todos los hermanos paraguayos porque gracias a Paraguay nosotros estamos acá y trabajamos. Nos gustaría entrar en un diálogo”, destacó el afectado.