El Club Nacional de Regatas El Mbiguá, uno de los clubes decanos de Paraguay, en la fecha cumple 120 años de vida institucional. El remo es la carta de presentación de este club, ya que en la historia del remo en Paraguay, siempre El Mbiguá fue el formador de los más grandes atletas del remo, que se destacaron a nivel local e internacional.

En este sentido, este círculo de atletas del remo y otros deportes más que fueron sumándose a lo largo de los años, fundado por un grupo de jóvenes amigos, encabe­zado por Federico García Olias, quien fuera el primer presidente del club Mbiguá, prepara una serie de activi­dades sociales por el aniver­sario del club, entre ellos un brindis con presentaciones artísticas y un show de fue­gos artificiales.

“El Mbiguá alberga historias de varias generaciones. Quién no escuchó a sus abuelos, padres, tíos contar las anéc­dotas y vivencias transcurri­das en el querido club Mbi­guá, es por eso que no solo celebramos un aniversario más, celebramos cada una de esas historias, los triunfos deportivos, las fiestas inigua­lables, las tradiciones familia­res y el hecho de compartir con amigos en el magnífico escenario que nos brinda este privilegiado lugar de Asun­ción”, señaló Hilda Fernán­dez, presidenta del Mbiguá en comunicación con La Nación/Nación Media.

El Mbiguá, la edificación con escaleras que llegan a las aguas del río Paraguay, donde posan las aves mbiguá, fue sede de cientos de competencias sobre agua, como remo y canotaje, así como los bailes y fiestas socia­les más renombrados de todos los tiempos. Cruzar en lancha sobre la Bahía de Asunción hacia el Club Mbiguá fue siem­pre la cita perfecta, muchas parejas de antaño recuerdan sus salidas a bailar de fin de año en este emblemático lugar.

Además, el club cuenta con la pileta balnearia más grande del país, mide 3.000 metros cuadrados y está alimentada con agua de pozo subterrá­neo, con alto contenido de sal, similar al agua de mar. Carga unos 5.000.000 de litros de agua y sus socios y visitantes en épocas veraniegas suelen disfrutar de un refrescante chapuzón con sabor a mar.