Una joven paraguaya fue asesinada en el interior de su departamento en España ayer el viernes. La mujer fue identificada como Leticia Magalí Sanabria, de 28 años, quien buscó un mejor porvenir al no encontrar trabajo en su país. Ella era oriunda de Yby Yaú, departamento de Concepción. La joven presentaba indicios de estrangulamiento cuando fue hallada sin signos de vida y no habría sufrido golpes en el cuerpo. Los policías intervinientes encontraron un gran desorden en la vivienda de la compatriota. Apuntan que podría ser un hecho de feminicidio o un caso de robo domiciliario.
Lamentan que ante la falta de empleo, la ahora fallecida se trasladó en el 2018 a España para trabajar como empleada doméstica. En el lugar vivía con otras dos mujeres que también trabajaban en casas particulares como trabajadoras domésticas.
La familia refirió que no cuenta con información de una supuesta pareja de la joven, pese a que el hecho apunta a un feminicidio. El jueves la mujer se comunicó con su madre para comentarle que iba a realizar la transferencia de dinero como remesa, aunque haría el giro a nombre de otra persona. Sus familiares solicitan ayuda a las autoridades de nuestro país para poder repatriar los restos de la joven paraguaya. Lamentan que los trámites aún no se están realizando por parte de las autoridades nacionales. Aguardan una pronta respuesta de parte de la Secretaría de Repatriados.
ASALTAN A PARAGUAYA AL REGRESAR DE ESPAÑA
Una compatriota llamada Antonia Paredes emigró a España para buscar trabajo y un futuro más alentador. Allí se estableció por unos largos 15 años, donde trabajó y ahorró dinero para su regreso al país. Todo el esfuerzo fue en vano ya que al segundo día de su vuelta fue asaltada por delincuentes que hasta el momento continúan prófugos. Tres malvivientes irrumpieron en su casa mientras ella compartía una cena con familiares que le dieron la bienvenida en la colonia Libertad, de la localidad de San Rafael del Paraná, departamento de Itapúa. La alegría de la familia se convirtió en un profundo miedo al llegar los ladrones.
Los tres hombres portaban armas de fuego y actuaron con agresividad al dar la voz de asalto. A cada persona que se encontraba en la casa exigieron el dinero que tenían en ese momento. Con mucho temor entregaron joyas, teléfonos celulares y otros objetos de valor, informó el portal Más Encarnación.
De la compatriota que hace dos días llegó al país fue despojado G. 40 millones, suma que percibió tras cambiar los euros que trajo consigo. La tristeza se apoderó de toda la familia, especialmente de Antonia, que en cuestión de minutos se había quedado sin nada de todo el dinero que ganó como fruto de su trabajo en España.