El viernes, la fiscala Fátima Girala rescató a siete niños que habrían sido víctimas de abuso y de maltrato por parte de su propio padre. De los siete, cuatro eran niñas de 5, de 7, de 14 y de 17 años, todas ellas fueron abusadas sexual­mente y presentan serias secuelas en el cuerpo. De acuerdo a la investigación, la adolescente de 17 años habría sido prostituida desde tem­prana edad, a los 5 o 6 años. Mientras que los tres varo­nes habrían sido víctimas de manoseos indebidos, los mis­mos son de 4, de 5 y de 14 años.

En este terrible caso, la agente fiscal tuvo el acom­pañamiento de tres psicólo­gas forenses a fin de hacer la debida contención y los her­manos fueron inspecciona­dos por la médica forense de turno. La denuncia fue reali­zada por los vecinos.

El hombre fue detenido e imputado por la agente fis­cal, quien solicitó medida de prisión preventiva. En tanto que la madre de algunos de los menores era hijastra del supuesto autor; es decir, era hija de su esposa fallecida y el hombre la convirtió en su pareja. Por tanto que algunas de las víctimas son sus pro­pios hermanos y otros son hijos de ambos.

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La mujer, de 24 años de edad, también sería procesada por no haber puesto a conoci­miento de las autoridades el ambiente de abuso y maltrato vivido por los niños y niñas. Los pequeños eran abusados en presencia de sus demás hermanos y la pareja mante­nía relaciones sexuales frente a todos ellos.

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