Por Omar Jara. Agencia regional de Coronel Oviedo.
Una mezcla de alegría y tristeza y una profunda añoranza hacia el Paraguay flotan en el ambiente navideño para miles de compatriotas que alrededor del mundo viven la Nochebuena y la Navidad lejos de su tierra natal. Más aún en este tiempo aciago de la pandemia por el covid-19, ni siquiera pueden reunirse con parientes, amigos, compatriotas con quienes suelen encontrarse para celebrar estas fiestas. Pero en las mesas navideñas predominan las comidas tradicionales de nuestro país.
“Celebramos una Nochebuena atípica, ya que no pudimos reunirnos ni con los familiares que tenemos aquí por las restricciones establecidas por la pandemia. Solo pueden juntarse hasta seis personas en cada casa”, dijo Irma Rossana Cardozo, una compatriota oriunda de Coronel Oviedo que vive en Málaga, España.
Ella nos contó que está en España con su marido y sus dos hijos. “Acá la Navidad es muy diferente que en Paraguay, sobre todo, porque hace frío, mucho frío, y este año con la pandemia todo es más frío aún. Las decoraciones navideñas de las calles y eso, están muy bonitas pero no se puede disfrutar. Solo se puede salir hasta cierta hora, siempre con tapabocas y sin aglomerarse. El techaga’u, la añoranza es terrible, mucho más en estas fechas”.
Irma dijo que prepararon una cena como si estuvieran en Paraguay: “siempre intentando hacer las comidas típicas de Paraguay, la sopa paraguaya, el chipa guasu, el asado y el clericó, sobre todo, aunque haga frío, porque nos recuerda a nuestro país y porque buscamos que nuestros hijos tampoco pierdan el hilo de la tradición paraguaya”, expresó. En su primera Navidad en España se indigestó con manjares marinos.
“Siempre es emotivo y se siente ese py’a kyrÿi, cuando llegan estas fechas, sobre todo si vivimos lejos de la patria. En la Navidad, el Año Nuevo y la Semana Santa el deseo de estar en Paraguay se hace muy fuerte”, refirió Arnulfo González Mann, compatriota residente en Bilbao, España. “Esta Navidad la pasamos en familia, mi señora, mi hija, mi yerno y yo. Solíamos reunirnos con la familia de una hermana de mi señora, pero este año no fue posible debido a la pandemia”.
Arnulfo recordó que llegaron a España en el año 2002 y que en la primera Navidad en la madre patria fueron invitados a compartir la cena en la casa de una compatriota que estaba casada con un ciudadano español. La cena se hizo a base de pavos y esos bichos de mar. Yo no quería comer demasiado esos raros seres marinos, pero ellos me insistían y por educación no podía negarme tampoco. Entonces tuve que probarlos y me produjo una linda indigestión porque tienen mucho ácido y yo no estaba acostumbrado”, comentó entre risas. Agregó que en su casa siempre preparan las comidas tradicionales de nuestro país como “la sopa paraguaya, el chipa guasu, el asado al horno, una ensalada de arroz. Cuando nos reunimos casi no comemos las comidas de acá, y mi yerno que es vasco, también ya se acostumbró a la comida paraguaya”, enlazó.
Finalmente, dijo que “este año no vamos a pasar una Navidad como de costumbre. Hay menos preparativos. El ambiente no es propicio debido a esta situación que se está pasando”, dijo refiriéndose a la pandemia del covid-19.