El sistema sanitario no mejoró durante la pandemia para hacer frente a los casos positivos de covid-19, sino que algunos hospitales fueron fortalecidos en el número de camas y trabajadores de blanco. “Eso no significa que el sistema mejoró, eso es otra cosa”, afirmó el doctor Tomás Mateo Balmelli, infectólogo y pediatra, en el programa “Cara o cruz”.

El aumento de camas y la contratación de más personal de blanco son solo una parte de lo que implica mejorar y fortalecer el sistema sanitario y el Ministerio de Salud Pública tuvo de marzo a octubre para hacerlo y debe ya fijarse en lo que podría ocurrir el próximo año, advirtió Balmelli. Explicó que de marzo a octubre no aparecieron las enfermedades respiratorias que colapsan los hospitales y eso permitió desinflar el estrés por el que cada año atraviesa el sistema sanitario.

“El 2021 será un año de mayor reactividad e interacción de las personas y hago un llamado a las autoridades que vean ya el 2021 para que no falten antibióticos, antivirales, suero y otros, sé que es difícil la compra en el extranjero; entonces, echemos mano a la industria nacional y trabajemos en forma conjunta porque será un año complicado”, señaló.

Cuestionó la comunicación llevada adelante hasta ahora por el Ministerio de Salud Pública (MSP), que a lo largo de la cuarentena confundió y eso hace que la gente se relaje en cuanto a mantener vigente las medidas sanitarias para evitar contagios masivos. “No tenemos nada que agradecer a las autoridades, están haciendo su trabajo y el pueblo les está pagando por eso”, remató.

Balmelli puso como ejemplo países altamente católicos, como México y Brasil, que suspendieron en forma presencial sus celebraciones más importantes del año, y también nombró al Vaticano, donde el papa Francisco celebra las misas solo y sin público. Pidió más seriedad en la comunicación y recordó que existen antecedentes históricos de la suspensión del evento de Caacupé y que este es un momento de crisis.