Un vehemente llamado a la “prudencia y obediencia” hizo ayer monseñor Ricardo Valenzuela, obispo de Caacupé, instando al cumplimiento responsable de la cuarentena inteligente que rige desde mañana con una reanudación gradual de las actividades laborales. “Habrá flexibilización y se debe ver lo que pasará en las semanas siguientes”, dijo el prelado durante la celebración de la tradicional misa dominical en la basílica de Caacupé.
El obispo elogió y agradeció la heroica labor de los médicos y paramédicos, a quienes atribuyó el mérito de haber evitado que hospitales desbordaran por la pandemia del nuevo coronavirus que hasta el momento afectó a 370 personas en nuestro país.
“Sí creemos que es un acierto importante el seguimiento estricto de los casos para ver la cadena de transmisión, de lo contrario esto se hubiera escapado completamente de las manos. Por ello nuestra inmensa gratitud a los médicos y enfermeras y a todo el personal de los hospitales. Sepan que les apoyamos a todos ustedes y a quienes trabajan más allá de sus fuerzas con nuestra oración y nuestra solidaridad”, expresó.
Valenzuela hizo suyas las expresiones del papa Francisco en su mensaje a la feligresía y pidió prudencia y obediencia en el cumplimiento de las indicaciones dadas por el Gobierno cuando se active la flexibilización de la cuarentena.
“En la misa del martes pasado decía el papa Francisco que en este tiempo, cuando empezamos a tener disposiciones para salir de la cuarentena, le pedimos al Señor que le dé a su pueblo, a todos nosotros, la gracia de la prudencia y la obediencia a las disposiciones para que la pandemia no vuelva”, recordó el obispo de Caacupé.