“Te saca el oxígeno totalmente. El gusto tam­bién lo perdí como por una semana”, contó Patricio Nava­rro, un compatriota que pade­ció el coronavirus y tuvo que estar 20 días internado en un hospital español. El miérco­les pasado le dieron el alta y está evolucionando favorable­mente, aunque por 2 semanas más se mantendrá aislado en Madrid.

En charla con Universo 970 AM contó que todo inició con un dolor de cabeza y luego ya vino la fiebre, por lo que deci­dió comunicarse por teléfono con el personal de salud que le aconsejó acercarse al hos­pital. Allí le hicieron los estu­dios que determinaron que tenía la COVID-19, mientras sus pulmones, ya muy infla­mados, le daban la peor de las sensaciones.

“Cuando dijeron que si no reac­cionaba, tenían que pasarme a cuidados intensivos, eso fue como si me viniera el mundo abajo. Ahí, en terapia no sabés si vas a salir o no. He llorado, he pensado en mi familia, en mi padre, tengo una niña aquí y otro en Paraguay y siempre he sido una persona que hace mucho deporte, hasta pensé ‘me estará pasando a mí esto justamente’. Pensás lo peor, yo pensé que no iba a salir de ahí, esa es la verdad”, confesó.

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Patricio resaltó que estar en el hospital no significa que te vas y te sanas. “Podés salir de ahí o no, ya sea lo que Dios quiera. Yo he rezado mucho y también lo ha hecho mucha gente. La verdad que la parte sanitaria, España es considerada como una de las mejores de Europa. En el hospital donde estuve había 500 camas de terapia, solo en un hospital y en Para­guay creo que en todo el país no hay 200 camas”, lamentó.

El compatriota cree que en el trabajo contrajo el virus, a pesar de usar guantes y tapa­bocas, y contó que es empren­dedor. Trabaja haciendo entregas de paquetería y expuso que el mayor conta­gio está en el contacto de una persona a otra.

El hombre relató que ahora le esperan 2 semanas más estar encerrado en la casa y después hacer otro control médico. En cuanto al tratamiento, men­cionó que entre las medicinas que le dieron estaba una para combatir la malaria y otra el VIH. “Esos fueron los medi­camentos que nos dieron”, añadió.

Relató que estaba con oxígeno a cada momento. “Para ir al baño me llevaban con el oxí­geno, hacía 2 pasos y se me aca­baba el aire, no podía respirar para nada. Una neumonía es lo que te da”, refirió. Finalmente, al ser consultado si tiene pen­sado volver a Paraguay, sostuvo que ahora mismo no y que las­timosamente en nuestro país no hay oportunidades.

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